Grecia desaloja a cientos de inmigrantes acampados junto a la frontera con Macedonia

Se trata de paquistanís, marroquís e iranís, a los que las autoridades macedonias no deján pasar ya que solo aceptan a sirios, iraquís y afganos

32109514 60

32109514 60 / TS KAJ**TOK**

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Policía de Grecia inició este martes una operación para desbloquear las vías de ferrocarril a la altura de la frontera norte, donde miles de personas habían acampado hace casi tres semanas, después de que Macedonia no les permitiese el paso.

En la zona fronteriza, cercana a la localidad griega de Idomeni, hay unos 400 policías antidisturbios y, según recogen los medios locales, el desalojo se está produciendo sin violencia ni el uso de gases lacrimógenos, aunque no se ha permitido la presencia de periodistas ni fotógrafos.

Los agentes indican a los migrantes que suban en autobuses en los que serán trasladados a los centros de acogida de Atenas.

Se trata de unos 1.200 ciudadanos, en su mayoría procedentes de Pakistán, Marruecos e Irán, a los que el Gobierno de la Antigua República Yugoslava de Macedonia no permite la entrada desde el 20 de noviembre.

SOLO SIRIOS, AFGANOS E IRAQUÍS

Macedonia adoptó esta medida después de que Serbia, Eslovenia y Croacia decidiesen dejar pasar únicamente a sirios, afganos e iraquís.

La decisión provocó la interrupción de la circulación de trenes de mercancías entre Grecia y Macedonia, porque los que permanecieron en el paso fronterizo acamparon alrededor de las vías ferroviarias.

Según publicó ayer el diario Kathimerini, algunas multinacionales decidieron variar la ruta de sus envíos al centro de Europa para no pasar por el puerto de El Pireo, en Atenas, y evitar así el trayecto por Macedonia.

PÉRDIDAS ECONÓMICAS

En su lugar, eligieron el puerto de Koper, en Eslovenia, con las consecuentes pérdidas que eso genera en la economía helena. Además, el cierre parcial de la frontera provocó enfrentamientos entre refugiados y migrantes y de estos últimos con la Policía.

El ministro griego de Migración, Yanis Muzalas, afirmó ayer que el Gobierno no quiere un "derramamiento de sangre" por una intervención policial en la frontera y dijo que la situación se solucionaría en los días posteriores. Muzalas señaló que los que retornen a los centros de acogida de la capital griega podrán solicitar asilo en Grecia o regresar a sus países acogiéndose al programa de retorno voluntario. En cambio, los que sean calificados como migrantes económicos serán retornados a sus países.