UNA POLÉMICA RECIENTE

'Calciopoli' a la griega

Dos niños acuden a entrenar a las instalaciones del Olympiacos FC.

Dos niños acuden a entrenar a las instalaciones del Olympiacos FC.

A. M.
ATENAS

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El tándem Móralis-Marinakis no es el único que ha sabido aprovecharse del fútbol para lograr sus objetivos políticos. En la ciudad de Volos el expresidente del principal club de fútbol local, Ajilleas Beos, fue elegido alcalde pese a haber sido uno de los principales implicados en la trama Koriopolis-llamado así en imitación al escándalo Calciopoli que sacudió el fútbol italiano en el 2006-y a que, según la prensa local, varios de los elegidos como concejales en su lista electoral son miembros de Amanecer Dorado.

«Creo que cualquiera que quiera servir a su ciudad tiene que evitar a los políticos», afirmó Beos en una de las entrevistas durante su campaña, en la que prometió hacer de Volos un nuevo Mónaco. En el caso de Beos, el secreto de la victoria electoral ha estado en sus lazos con el fútbol y en este discurso contra los políticos y sus corruptelas.

Ello a pesar de que el 22 de junio de 2011 fue uno de los 15 detenidos en una investigación policial abierta en Grecia tras varios informes de la UEFA sobre partidos amañados, apuestas trucadas y lavado de dinero en la temporada 2009-2010. En algunas de las conversaciones grabadas por la policía se escucha a Beos y al presidente del Olympiacos de El Pireo, Evángelos Marinakis, decir: «Pon a Pamporidis (un árbitro) para el partido PAOK-Panathinaikos y te guardas a Sidirópulos (otro árbitro, presuntamente comprado) para tí para otra semana». En otras conversaciones Beos profiere insultos y amenazas contra quienes no aceptan entrar en la trama.

Koriopolis amenazó durante meses con acabar con el fútbol griego ya que incluso jugadores de la selección fueron señalados por la investigación. Finalmente se corrió un tupido velo y la investigación ha quedado atascada en los tribunales. En el aspecto deportivo, la Federación de Fútbol de Grecia, decidió que el Olympiacos de Volos y el Kavala fueran obligados a descender a la cuarta división, mientras Beos, tras deshacerse de sus acciones en el club, escapó del castigo. Ese día Volos se convirtió en un campo de batalla, con cientos de seguidores enfrentándose a la policía y demostrando que los colores de su club estaban muy por encima de sus principios morales.