TENSIÓN EN EGIPTO

Suspendido el juicio a Mursi por negarse a vestir el uniforme de acusado

Policías antidisturbios vigilan la entrada de la Academia de Policía, este lunes en El Cairo.

Policías antidisturbios vigilan la entrada de la Academia de Policía, este lunes en El Cairo. / periodico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El Tribunal Penal de El Cairo ha levantado este lunes la sesión del juicio contra el depuesto presidente egipcio Mohamed Mursi debido a que el procesado se ha negado a vestir el uniforme de acusado como le pedía el juez y se ha declarado el presidente legítimo, ha informado la televisión estatal egipcia.

La primera sesión del juicio, en el que también están procesados otros 14 dirigentes de los Hermanos Musulmanes por su supuesta implicación en la muerte de manifestantes en diciembre pasado, ha durado apenas una hora. El tribunal ha decidido que se reanudará cuando Mursi decida ponerse dicho uniforme, un traje blanco, sin dar más detalles.

La cofradía ha explicado en su página web que Mursi se ha mostrado sonriente durante la vista, se ha negado a cambiar de vestimenta [en Egipto, los acusados llevan un traje blanco, y los ya condenados van de azul] y ha insistido en que es el presidente legítimo de Egipto.

Otro de los procesados, Mohamed Beltagui, miembro de la ejecutiva de la Hermandad, ha gritado en la sala: "Abajo el régimen militar". Se le han sumado el resto de acusados, que también han hecho con la mano en alto el símbolo de las protestas de los islamistas, según la televisión catarí Al Jazira.

Incidentes en el exterior

El juicio contra Mursi había empezado en la Academia de la Policía, a las afueras de El Cairo, mientras en la calle se registraban incidentes entre sus simpatizantes y la policía.

Mursi, que ha sido trasladado al lugar en helicóptero, está procesado junto con otros 14 dirigentes de los Hermanos Musulmanes por su supuesta implicación en la muerte de manifestantes y en los incidentes ocurridos en los alrededores del palacio presidencial de Itihadiya el 5 de diciembre del 2012.

El órgano encargado de juzgarlos es el Tribunal Penal de El Cairo, presidido por el juez Ahmed Sabri, y el proceso se ha desarrollado en la Academia de la Policía por motivos de seguridad.

Equipo legal

El depuesto presidente no reconoce la autoridad del tribunal, por lo que su equipo legal asistía a esta primera sesión solo como observador, pero no para defenderle. A siete de los treinta miembros de este equipo legal se les ha impedido el acceso a la sala, según ha explicado un portavoz de los Hermanos Musulmanes, Islam Taufiq.

Entretanto, la policía ha lanzado gases lacrimógenos contra los cientos de partidarios del depuesto presidente congregados frente a la sede del tribunal. Fuentes de seguridad sobre el terreno han informado  de que las fuerzas del orden han empleado los gases para dispersar a los manifestantes que impedían el paso en la entrada de la Academia de la Policía.

Llegada en helicóptero

El traslado de los acusados se ha producido de diversa manera. Mientras Mursi era trasladado en helicóptero, los otros 14 inculpados, entre ellos el vicepresidente del Partido Libertad y Justicia (PLJ) --brazo político de la Hermandad--, Esam al Arian, y el miembro de su ejecutiva Mohamed Beltagui, han llegado al tribunal en vehículos blindados y entre grandes medidas de seguridad.

Las fuerzas del orden han cortado al tráfico la carretera que conduce desde la cárcel de Tora, donde se encontraban presos estos 14 dirigentes islamistas, hasta la Academia de la Policía para evitar eventuales ataques.

Estrictas medidas de seguridad

Las medidas de seguridad son muy estrictas en torno a la Academia de la Policía, donde varios cientos de simpatizantes de Mursi se han congregado para expresar su rechazo al proceso. Un total de 20.000 miembros de la Policía y las Fuerzas Armadas se han desplegado en los alrededores del tribunal, han indicado los medios oficiales egipcios.

Las fuerzas de seguridad se han apostado en las carreteras que comunican con la sede judicial, y han reforzado patrullas y puestos de control en el país, ante el temor a que las protestas convocadas por los partidarios de Mursi deriven en nuevos disturbios.

Incidentes en Itihadiya

Mursi y el resto de procesados afrontan cargos por su supuesta implicación en la muerte de manifestantes y en los incidentes desatados en los alrededores del palacio presidencial de Itihadiya el 5 de diciembre del año pasado.

Sobre Mursi pesan además otros cargos cuyos juicios todavía no han sido fijados, como los de conspirar con el grupo islamista palestino Hamás, atacar a las fuerzas de seguridad e insultar al poder judicial.

Los Hermanos Musulmanes denunciaron ayer en un comunicado que el juicio es como si "la traición juzgara la honestidad" o "la dictadura a la democracia", y pidió que siga la "lucha pacífica" contra el Ejército egipcio.