El alma en Granollers de los Special Olympics catalanes: "La inclusión es hacer ciudad"

Unos 1.500 deportistas con discapacidad intelectual han exhibido su talento deportivo en la edición catalana de los Specials Olympics, los Juegos Olímpicos de personas con discapacidad intelectual, que ha acogido el municipio catalán Granollers este 2023. La ciudad hizo lo propio en el año 1994, hace ahora casi treinta años.

Por su parte, otros 600 voluntarios que han participado de la cita han vuelto a convertirse en la piedra angular para prender la llama de los juegos. De hecho, fueron los encargados de llevar la antorcha que galardona a Granollers como la “ciudad de inclusión deportiva”, hecho que dio el pistoletazo de salida para recibir las catorce disciplinas deportivas incluidas en esta nueva edición del 2023, celebrada del 30 de marzo al 2 de abril.

Los voluntarios de Granollers ya fueron un pilar fundamental de los juegos hace prácticamente tres décadas, cuando la capital vallesana ya fue sede de los Specials Olympics en su cuarta edición. Montse Cuevas (64 años), Joan Pena (45) y Desiréé Pascual (48) fueron ya voluntarios en la edición de los Special Olyimpics del 1994. Casi treinta años después, explican a EL PERIÓDICO cómo han vuelto a vincularse personalmente con los juegos con el objetivo de “hacer llegar el deporte de élite a todo el mundo, sin barreras intelectuales”. 

Cuevas, Pena y Pascual se muestran sensibilizados con el deporte y la inclusión para brindar “por una sociedad justa e igualitaria en todos los sentidos”. Aún así, lamentan que este año no haya existido la difusión que les gustaría, echando así de menos más “promoción” para que el Palau de l’Esport se convirtiera en un bullicio de personas que en sincronía dieran paso a la ceremonia deportiva.

Organizar los 'Special' "desde el corazón"

Montse Cuevas tilda la cita deportiva de “magia y delicadeza”, enfatizando que "todo el mundo debería vivirla". Cuevas es deportista, entrena natación todos los días y la piscina se ha convertido prácticamente en "su segundo hogar", bromea. En esta edición de los Special Olympics, se ha dedicado a la megafonía de la natación.

En la edición del 1994, Cuevas era castellera de los Xics de Granollers, que exhibieron un pilar en la inauguración que a su vez dio luz verde a la jornada deportiva: “Impresiona ver tanta gente volcada, desde autoridades políticas hasta los vecinos más próximos de la ciudad”, asegura Cuevas, que apunta que "como se hace desde el corazón, es muy difícil que las algo salga mal”.

La atleta y voluntaria recuerda los primeros juegos celebrados en su ciudad con una participación más alta, aunque "los voluntarios estábamos igual de entregados”. Explica también que la “solidaridad” no ha cambiado y las ganas “para que todo funcione rodado son las mismas”. Paradójicamente, recuerda más volumen de gente en el 1994, si bien reconoce que "en términos generales, los juegos eran más pobres". "No había tanta especialización", detalla.

Sin embargo, Cuevas concluye que a Granollers “le ha ido muy bien convertirse en la sede de los Special", y zanja: "Va más allá del deporte: es complicidad y unión. La inclusión es una forma de hacer ciudad”. 

“Había más desconocimiento”

Por su parte, Joan Pena señala que siempre que ha tenido oportunidad se ha apuntado a las listas de voluntario en las jornadas deportivas. Participó en las Olimpiadas de Barcelona del 1992, en los 'Special' del 1994 y en esta nueva edición, la del 2023. Pena recuerda que “en el 94 veníamos de unos juegos olímpicos y, por este motivo, los 'Special' estuvieron al nivel”.

Aun así, recuerda que “a nivel de sociedad no estaba tan escuchado, ya que el tema de los deportistas con discapacidades intelectuales quedaban más al margen y había más desconocimiento sobre estas competiciones”, añadiendo que en aquel momento "se trató de la cuarta edición, por lo que se encontraba en sus inicios”. 

A juicio de Pena, un hecho que ha decantado la balanza hacia “el conocimiento y aprobación social” para la inclusión en el deporte fue la película Campeones, estrenada en 2018: “A día de hoy, la sociedad está más sensibilizada y la discapacidad en el deporte está más normalizada”. 

Asimismo, el voluntario lamenta que no haya habido tanto eco de los 'Special 2023' en Granollers: “No he recibido información; prácticamente no estaba anunciado en la ciudad y tampoco ha tenido alcance en los medios de comunicación”, comenta.

En cuanto a infraestructuras, Pena critica que no se han adaptado para los juegos, algo “que se podría tener en cuenta” pero que no ha sido un problema: “Es fácil ayudar a que todo funcione, surge de forma innata”. 

“El funcionamiento y la infraestructura no ha cambiado”

Desiréé Pascual define su experiencia en los juegos del 1994 como “impactante y gratificante”, por lo que “esta vez no me lo he pensado dos veces”. Hace treinta años estaba en la sección informativa, mientras que este año ha estado en la disciplina de gimnasia artística y rítmica.

Pascual rememora el funcionamiento y las infraestructuras de la última edición de los juegos en Granollers y manifiesta que no “han cambiado, pero funcionan bien". Sin embargo, detalla que este año los voluntarios han sido “muy bien acogidos”, algo que la voluntaria ejemplifica con los alimentos facilitados durante toda la jornada.   

"Parece que en esta edición había menos gente", concluye Pascual, quien también se suma a la crítica de la falta de difusión: "He tenido que buscar expresamente cómo hacerme voluntaria", lamenta.

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