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Los Goya de Valladolid

'La sociedad de la nieve' se corona con un alud de 'goyas'

La película de J. A. Bayona recibe en Valladolid el espaldarazo de la Academia y consigue 12 premios antes de viajar a Hollywood para empezar la carrera hacia el Oscar.

Rafael Tapounet

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'La sociedad de la nieve', de J. A. Bayona, no solo sobrevivió a la larga ceremonia de la 38ª edición de los Premios Goya sino que recibió un alud de premios (12) en la gélida noche vallisoletana y salió de la gala coronada como la mejor película española de 2023. La épica producción de Netflix doblemente nominada al Oscar que está registrando números de récord en la plataforma recogió 12 galardones, incluido el de mejor director para un Bayona que iguala en el cómputo histórico a Pedro Almodóvar al sumar ya tres Goya en esta categoría (que, en su caso, son cuatro si se le añade el premio a la mejor dirección novel que obtuvo por 'El orfanato'). La otra cinta española que aspira a un Oscar ('Robot dreams', de Pablo Berger, en el apartado de mejor largometraje de animación) también recibió el respaldo de los miembros de la Academia del Cine en forma de dos cabezones.

Más allá del reparto de premios, la gala de los Goya, celebrada este año en el recinto ferial de Valladolid, será también recordada por la firmeza con la que algunos de los participantes elevaron la voz para condenar la existencia de comportamientos abusivos y machistas en el cine español y para reclamar la implicación de todo el sector (hombres y mujeres) en la erradicación de estas conductas. «Aquí, en el cine, también se acabó», proclamaron Ana Belén y Los Javis, presentadores de la función, nada más empezar una ceremonia que condujeron con agilidad, encanto y un punto de sano desbarajuste. 

La película de Bayona arrasó en las categorías técnicas, sin excepción

Hubo también arengas para pedir más diversidad racial en el cine español, en pro de la «paz para Palestina», en defensa del sector cultural en Argentina, en contra de la prostitución, de alerta ante la crisis climática y hasta un «visca la pagesia», así, en catalán. Nada que pudiera perturbar mucho a las autoridades presentes, encabezadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

En lo que antañe a los premios mayores, la Academia se debatía este año entre dar un espaldarazo a la candidatura al Oscar de 'La sociedad de la nieve', rendir un homenaje tardío a un cineasta esencial como Víctor Erice en su regreso al cine o apostar por la voz nueva, femenina e independiente de Estibaliz Urresola y sus '20.000 especies de abejas', que partía como la película con más nominaciones (15, de las que solo ganó tres). Decir que 'La sociedad de la nieve' se comió a sus rivales sería un chiste de pésimo gusto, pero ya está escrito.

Como era previsible, la película de Bayona, una gran producción que eleva el techo industrial del cine español y va camino de ser el filme no hablado en inglés más visto de Netflix, arrasó en las categorías consideradas técnicas (se llevó los galardones de mejor montaje, mejor fotografía, mejor sonido, mejores efectos especiales, mejor dirección de producción, mejor diseño de vestuario y mejor maquillaje y peluquería, apartado en el que también aspira al Oscar) y se hizo asimismo con los premios al mejor actor revelación (Matías Recalt) y a la mejor música original por la partitura del estadounidense Michael Giacchino. Sumados a los de película y director, un total de 12 goyas que la convirtieron en la cinta más laureada de la noche, a mucha distancia de la segunda. 

Intérpretes

En el apartado de interpretaciones, el catalán David Verdaguer hizo buenos los pronósticos y se llevó el premio al mejor actor protagonista por su precisa y sutil interpretación del cómico Eugenio en 'Saben aquell'. Tampoco fue inesperado el triunfo como mejor actriz principal de Malena Alterio por su complejísima composición en 'Que nadie duerma', en el papel de una informática en paro (y enamorada) que se hace taxista. José Coronado ('Cerrar los ojos') y Ane Gabarain ('20.000 especies de abejas') reinaron como intérpretes de reparto, y Matías Recalt ('La sociedad de la nieve') y la nerviosísima Janet Novás ('O corno') fueron elegidos como intérpretes revelación.

David Verdaguer y Malena Alterio triunfaron como mejores intérpretes

Pero si hubo una actriz que dio lustre con su presencia a la gala de los Goya y puso en pie al auditorio, esa fue Sigourney Weaver, premio Goya Internacional, que hizo un elogio encendido del cine español, aseguró haber conocido a algunos «monstruos» en la industria (no se refería a Alien) y tuvo el detalle de compartir el galardón con su dobladora al castellano, la barcelonesa María Luisa Solá.

Pedro Almodóvar y Penélope Cruz debaten sobre abusos en los Goya

Pedro Almodóvar y Penélope Cruz debaten sobre abusos en los Goya / MARISCAL / EFE / VÍDEO: EUROPA PRESS

Emoción

En el top 3 de momentos emotivos de la ceremonia hay que reservar un lugar para la entrega (en diferido) del Goya de Honor al legendario director de fotografía, investigador y restaurador Juan Mariné, toda una vida -y qué vida: 103 años llevados con envidiable lucidez- consagrada al celuloide. Lo presentó José Sacristán, que subrayó que Mariné «se dejó la retina» en conservar el patrimonio cinematográfico. Hubo también algo especial en los aplausos que suscitó el premio al mejor documental para Mientras seas tú, el aquí y ahora de Carme Elias, que la directora, Claudia Pinto, quiso dedicar «a las 900.000 personas que sufren alzhéimer en este país y a las familias que los cuidan». Y fue bonito el homenaje póstumo que Ana Belén y Los Javis brindaron a la vallisoletana Concha Velasco, fallecida el 2 de diciembre, con un chispeante medley de La chica ye-yé y Mamá, quiero ser artista.

Por lo que respecta al resto de las actuaciones musicales, consignar la pertinencia de ese Se acabó que cantaron India Martínez, María José Llergo y Niña Pastori; valorar el curioso crossover que se montaron Amaia y David Bisbal a cuenta del infalible 'Mi gran noche' de Raphael, y destacar la proverbial desenvoltura de los Estopa, que, en un entorno tan aparentemente ajeno como el de la gala de los Goya, tuvieron el cuajo de reivindicar a Los Chichos con una versión de 'Quiero ser libre'.