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La Fiscalía descarta actuar contra Rubiales pese a tener ya tres denuncias de particulares

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El beso de Rubiales a Jenni Hermoso.

El beso de Rubiales a Jenni Hermoso.

Cristina Gallardo

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La Fiscalía descarta por el momento actuar penalmente por el beso en la boca que el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, plantó sorpresivamente a la jugadora de la selección nacional Jennifer Hermoso en plena celebración de la victoria del equipo femenino este domingo en Sídney. Y ello pese a acumular ya tres denuncias de particulares que consideran que deben emprenderse acciones por un posible delito de agresión sexual.

Una de las denuncias, que llegaron a través del departamento de atención ciudadana de la Fiscalía General del Estado, han sido presentadas por el director del Centro de Formación para Entrenadores (CENAFE), Miguel Ángel Galán, quien también ha solicitado medidas contra Rubiales ante el Consejo Superior de Deportes (CSD). Las otras dos llevan la firma de dos particulares varones, según han informado a El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica, fuentes fiscales.

La cuestión es que el tipo de delito que podría haberse cometido por Rubiales es de carácter semipúblico y precisa denuncia de la persona agraviada, según las mismas fuentes, que concretan que hasta este momento no se ha producido dicha denuncia.

Aunque la ley también permite a la Fiscalía actuar "ponderando los legítimos intereses" del caso concreto, la realidad es que los fiscales sólo denuncian de oficio en este tipo de supuestos cuando las víctimas son menores o personas con discapacidad, y este es el criterio que por el momento va a mantenerse.

Competencia de la Audiencia Nacional

Por otro lado, el asunto en principio es competencia de la Audiencia Nacional, según detallan a este diario fuentes fiscales del órgano central. "Es delito cometido en el extranjero por español y la víctima es española, por lo que 'ab initio' es de nuestra competencia", señalan. 

Desde este departamento esperarán a conocer las denuncias que les remitan desde Fiscalía General para adoptar una decisión definitiva, aunque en principio prevalece la exigencia de una "previa denuncia de la persona agraviada, que es la mujer que recibió el beso".

Hermoso no ha dado ningún paso en el sentido de denunciar al presidente de su federación ante los tribunales, si bien ha pedido "medidas ejemplares" contra Rubiales a través de un comunicado conjunto con el sindicato mayoritario del fútbol español, FUTPRO. Dichas medidas son las que estudian adoptar las autoridades deportivas.

Los juristas consultados por este diario coinciden en la necesidad de que exista denuncia penal de la perjudicada si es que ella considera que hubo algún ánimo lúbrico o intencionalidad sexual, algo que parece que no va a ocurrir a tenor de las declaraciones públicas de la jugadora y de su entorno, pese a que en un primer momento manifestó que el gesto no le "gustó".

Lo ocurrido podría dentro del Código Penal, concretamente en el artículo 178 de la norma, con la pena de prisión de uno a cuatro años, como responsable de agresión sexual, el que realice cualquier acto que atente contra la libertad sexual de otra persona sin su consentimiento. El plazo de prescripción del delito es de cinco años.

La clave de este tipo de delitos es demostrar que no hubo consentimiento, si bien los expertos coinciden en que sin la denuncia de la agraviada la vía judicial tiene pocos visos de prosperar. Que la Fiscalía actuaran por su cuenta supondría por cargar cierta responsabilidad sobre a víctima, que se vería obligada a acudir al juzgado pese a no haber dado ningún paso en dicho sentido.