¿Qué hará Budweiser con la cerveza que no puede vender en Qatar 2022?

Apenas a 48 horas de la inauguración del Mundial de Fútbol de Qatar saltaba la primera sorpresa de la competición y lo hacía ajena al terreno de juego, pero no a la grada: los organizadores anunciaban que, definitivamente, no se admitiría el consumo de alcohol en los estadios ni en los alrededores, a pesar de que anteriormente estaba previsto que esta bebida sí estaría admitida durante la competición. El Fan Fest es el único espacio en el que se tolera el consumo. 

Al parecer, la familia real del país presionó a la FIFA para confirmar este veto, en una iniciativa que cogía en fuera de juego a algunos patrocinadores, con mención especial para Budweiser, a la sazón patrocinador principal del torneo en base a un acuerdo de promoción multimillonario, que quedaba desvirtuado al no poder comercializar sus bebidas.

La cara b de la inauguración del Mundial: autobuses perdidos, un tráfico infernal y sin comida en el estadio

Algunas voces auguraban una indemnización millonaria como compensación por el revés imprevisto. Y es que el veto podría repercutir en unos 40 millones para la FIFA, que había sellado el pacto con la cervecera por unos 75 millones de euros, según 'The Sun' . Aún no hay una decisión definitiva sobre cómo se saldará el acuerdo, más allá de unas declaraciones oficiales de AB InBey, la empresa propietaria de Budweiser: “Esperamos con ansias activar nuestras campañas del Mundial para celebrar el fútbol con nuestros consumidores, pero algunas de las activaciones planificadas en los estadios no pueden avanzar debido a circunstancias que escapan a nuestro control”.

Lo que sí ha trascendido ya es qué piensa hacer la compañía con la ingente cantidad de latas de cerveza que no podrá vender durante la competición en Qatar. “Nuevo día, nuevo tuit”, ha posteado la firma junto a una impresionante foto con un montón de paquetes de cerveza empaquetados y el avance de que irán destinadas a la selección que alce la copa del mundo en la final de la competición. “¿Quién las obtendrá?”, remata la empresa en la publicación.