Las lágrimas de Pedri y Olmo

Sobre el césped de Wembley no estaba Sergio Ramos. Tampoco ningún representante mediático del Real Madrid, como Isco o Asensio. En una España sin rastro del blanco excepto en el uniforme brillan otros futbolistas, empezando por dos jóvenes descarados y maravillosos, Dani Olmo y Pedri González, que completaron una actuación brillante ante Italia. El dolor final de ambos fue descorazonador. 

Enfrente no tenían a cualquiera. Se medían con rivales tremendamente experimentados, como Bonucci y Chiellini, esa pareja eterna de centrales que suman 70 años y 219 partidos internacionales. Este martes sufrieron con el dinamismo y la inteligencia de dos futbolistas que aseguran muchas alegrías en el futuro. La tercera prórroga consecutiva acabó condenando a una selección que jugó su mejor partido del campeonato. 

El 1x1 de España en la Eurocopa

La carta guardada

La euforia vivida ante Croacia y Suiza dio paso a las lágrimas por una injusta derrota que servirá para crecer a jugadores descarados como Olmo y Pedri. La desgracia se cebó en el primero con su fallo en el primer penalti. Luego vendría el error de Morata y el fin.

Luis Enrique sorprendió con su alineación. Tenía una carta guardada que le salió de maravilla. Ni Morata ni Gerard Moreno. El nueve, ese falso nueve que tan bien suele funcionar en España, quedó para Olmo. El punta del Leipzig (Terrassa, 23 años) firmó una soberbia actuación en Wembley.

Sin complejos

Solidario, incansable y desequilibrante, fue una pesadillla para la azzurra. Asistió a Morata en el gol del empate y completó su estadística con cinco disparos, cinco centros y cinco faltas recibidas. Su error en la tanda fue el único lunar.

Ese chaval que estuvo en la cantera del Barça de los 9 a los 16 años desarboló a Italia sin complejos. Luis Enrique ha creído siempre en el jugador catalán, que supo progresar en el Dinamo de Zagreb durante cinco años antes de fichar por el Leipzig. No haría mal Joan Laporta en recuperar a un futbolista que puede jugar en todas las demarcaciones del ataque con gran productividad. Su sacrificio y su verticalidad son una auténtica joya para cualquier conjunto.

Elogios de Lineker

La maestría de Olmo vino acompañada de otra lección de Pedri (Tegueste, Tenerife, 18 años). Quienes lo han seguido en el Barça durante este curso no deberían sorprenderse, pero en un duelo con la exigencia de este martes acabó de explotar. Cerró la primera parte con un 100% de acierto en sus 31 pases.

Cada balón que pasó por sus botas fue mejorado por el astro canario, que levantó elogios por todo el mundo.«Pedri es taaaaaan bueno. Superestrella absoluta en la creación. Futbolista maravilloso», escribió Gary Lineker. En el New York Times le ven incluso peleando por el Balón de Oro. Su llanto final resultó conmovedor. Su torneo no merecía ese final.