Contenido de usuario Este contenido ha sido redactado por un usuario de El Periódico y revisado, antes de publicarse, por la redacción de El Periódico.
Catalunya: la verdadera patria es la vida humana
El parque de la Ciutadella (Barcelona) con lazos amarillos. / FERRAN NADEU
Jesús Pichel Martín
Octubre del 2017 fue un mes crítico porque nadie sabía a ciencia cierta qué iba a pasar cuando se produjera el permanentemente anunciado choque de trenes entre el secesionismo catalán y el Estado. Más en privado que en público, había un cierto sentimiento de temor, un miedo sordo a que pudiese derivar en un cruento conflicto civil.
Entretodos
Desde el referéndum declarado ilegal hasta la aplicación del artículo 155 CE, pasaron 27 días difíciles, vertiginosamente peligrosos, en los que se sucedieron acciones y reacciones: el referéndum del día 1 -con cargas policiales y altercados entre antidisturbios y defensores de la consulta-; el discurso del Rey del día 3 -bordeando los límites de su papel constitucional- o el discurso del día 10 de Puigdemont asumiendo el mandato del pueblo de que Catalunya se convierta en un estado independiente en forma de república e, inmediatamente, proponiendo que se suspendieran los efectos de la declaración de independencia -que jurídicamente no había sido declarada-.
También ocurrió la entrada en prisión de los Jordis por orden de la AN y, por último, el 27, el Parlament declaró unilateralmente la independencia de Catalunya, el Senado dio autorización al Gobierno para aplicar el artículo 155 y Rajoy cesó a todo el Govern, disolvió el Parlament y convocó elecciones autonómicas para el 21 de diciembre, todo en unas pocas horas.
Ingenuamente, muchos creímos que, aunque el conflicto no se había resuelto, el peligro de confrontación civil ya había pasado. Pero lo que viene pasando desde la elección de Torra como nuevo president de la Generalitat genera un temor aún mayor al de entonces.
Mayor, porque secesionistas y constitucionalistas ya saben que sus estrategias -la DUI y el 155- han fracasado. Entérense unos y otros: el mayor peligro no es que Cataluña se independice, 'que se rompa España' o que la Generalitat pierda su autogobierno, sino el disparate de la confrontación civil. No sé cuál es la solución del conflicto, pero sí sé que la sangre no puede serlo. La verdadera patria común es la vida humana.
Participaciones de loslectores
"¿Necesita Begoña Gómez que su marido la defienda, por muy presidente que sea?"
Carmen Gil El Puerto de Santa María (Cádiz)
Másdebates
23 de abril
- Investigación La FGE sustituye a la fiscal de Madrid por el fiscal superior de Extremadura en la querella de la pareja de Ayuso contra dos fiscales en su caso de fraude
- 'Trekking' VIP Este domingo puedes visitar el bosque del Prat que solo abre 10 veces al año
- A los 58 años Muere Carola Miró, la esposa del expresidente de la Generalitat Quim Torra
- De Brasil al mundo Cómo ver el concierto gratuito de Madonna en Copacabana
- En Rambla Prim Un muerto en un tiroteo al lado de la parada de metro de Maresme-Fòrum de Barcelona
- Evacuación sanitaria Conmoción en 'Supervivientes' por la baja médica de dos concursantes al mismo tiempo: ¿Abandono definitivo?
- Ellas siempre estuvieron (X) Eva Ferrer, especialista en salud femenina en el Barça Innovation Hub: "La regla es un signo de salud y hay que naturalizarlo"
- SHOPPING Las bolsas de cocina hechas para los celíacos: muy útiles
- Hambre y conflictos Álvaro Lario, presidente de Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola: "Habrá más conflictos por los recursos y el agua"
- Barcelona Global Luigi Salmoiraghi: "La calidad de vida de Barcelona está por encima de la de muchas otras capitales europeas"