Contenido de usuario Este contenido ha sido redactado por un usuario de El Periódico y revisado, antes de publicarse, por la redacción de El Periódico.

"Me gustaría que mi discapacidad fuera una circunstancia y no un problema"

El presidente de CaixaBank  Jordi Gual, el presidente de la Federacion Espanola de Deportes de Personas con Discapacidad Fisica, Jose Alberto Alvarez, y el secretario de Estado para el Deporte y presidente del CSD, Jose Ramon Lete.

El presidente de CaixaBank  Jordi Gual, el presidente de la Federacion Espanola de Deportes de Personas con Discapacidad Fisica, Jose Alberto Alvarez, y el secretario de Estado para el Deporte y presidente del CSD, Jose Ramon Lete. / Efe / Paco Campos

El hecho de que todas las personas pasamos algún momento de nuestra vida por situaciones discapacitadoras debería abrirnos los ojos para empezar a hacer un cambio de paradigma hacia todas las personas con diversidad funcional para que puedan ser tratadas y conceptualizadas como nos gustaría que nos trataran a nosotros en caso de encontrarnos en una situación parecida.

Entretodos

Publica una carta del lector

Escribe un 'post' para publicar en la edición impresa y en la web

Reflexión personal, reflexión social. En primer lugar, me gustaría ser una persona autónoma y seguir siendo un sujeto activo de la sociedad. Me gustaría no encontrarme con tantas barreras arquitectónicas y, por tanto, tener más facilidades para moverme y acceder a todos los espacios públicos y privados, sin depender de nadie, o con la menor dependencia posible. Por ello, me gustaría encontrar un entorno pensado para todos y todas. Y que mi discapacidad fuera una circunstancia y no un problema.

Como nuestro entorno social y arquitectónico, de momento, me causa tantos problemas, me gustaría poder contar con el apoyo de una persona, cuando lo necesitara. Un apoyo que sea de acompañamiento, no de dirección, un soporte que establezca una relación de persona a persona, no de trabajador a discapacitado. Una relación que vaya más allá de mi situación y que consiga potenciar mis capacidades más que mis limitaciones. Una relación cercana y de confianza, donde la persona que me acompaña me ayude, me aconseje, pero que me deje elegir cómo y qué vivir. Una persona que me respete y me vea como alguien diferente, como individuo con mi propia personalidad y vida, que me descubra desde una perspectiva global y que vele por mi dimensión corporal, intelectual, emotiva, social y espiritual. Para así, poder sentirme realizado y tener las oportunidades de que dispongo o deberíamos disponer todos.

Me gustaría también elegir, equivocarme y volver a intentarlo, ya que si no paso por este proceso, y no lo practico, al final acabaré siendo un objeto, un sujeto pasivo, que ni querré ni sabré elegir qué es lo mejor para mí. También me gustaría tener algo que decir sobre las leyes y las acciones sociales que en teoría deben beneficiarnos. Creo que todos y todas queremos, y tenemos derecho a escoger, en lo posible, las futuras acciones, leyes y derechos que nos deben guiar en nuestra vida.

Me gustaría que mi entorno pensara que el cuerpo perfecto no existe, y estos estigmas que nos afectan radicalmente a todas las personas que padecemos situaciones discapacitadoras desaparecieran. Me gustaría que me comprendieran y me valoraran por mi persona, por mi interior y no como un cuerpo o un objeto más o menos normalizado socialmente.

Y a ti, ¿cómo te gustaría ser tratado? Reflexionar es apostar por un cambio. Y el cambio es para mejorar.

Participaciones de loslectores

Másdebates