10 consejos de maquillaje a partir de los 50

De las dos partes de las que consta el maquillaje, la 'invisible', que se refiere a la preparación del 'lienzo' (esto es, la piel, que consta de la hidratación y del color del fondo); y la 'decorativa', que incluye todo lo ornamental ('eyeliners', brillos, sombras de colores...), a partir de los 50 hay que prestar especial atención a la primera, pues con la edad se pierde "luminosidad, no transparenta tanto la sangre que fluye por debajo de la piel, se pierde esponjosidad en las mejillas y en la boca", asegura Corinne. Por eso, hay que escoger buenas fórmulas para cada una de estas partes.

Respecto a ampollas efecto 'lifting', los tensores, hay que saber que tienen una textura bastante pegajosa. Por eso se debe esperar media hora para aplicar la base después del tensor, y elegir un fondo de maquillaje oleoso (que son la mayoría) y descartar los acuosos, porque se repelen con la ampolla.

"Últimamente se habla mucho del efecto 'glossy' en la piel (recrea un rostro con relieve, fresco y acabado brillante, que no grasiento). Pero para pieles de cierta edad no es recomendable, porque puede potenciar las zonas flácidas. Tampoco sugiero los acabados mate muy mate, porque no son naturales. Y cuanto más natural, más da la sensación de piel saludable, que respira", sostiene la experta.

Asegura Corinne Perez que "cuanto más producto pongas -léase correctores-, más se va a notar la edad". Por, eso, recomienda saber encontrar ese cubreojeras que corrige la imperfección pero que a la vez es de textura fina y estable. El producto estrella para ella es el fijador, siempre y cuando no lleve alcohol. Se trata de esas brumas que fijan el maquillaje una vez finalizado. "Están estudiadas para dejar un aspecto natural y jugoso de piel ya que matizan las texturas del maquillaje".

"Polvos, sí, siempre, pero hay polvos y polvos", adelanta la maquilladora, que recomienda "los polvos de última generación, con partículas finísimas, casi imperceptibles y ultraligeros". "Cuando la tele pasó de analógicas a alta definición, las partículas de los polvos absorbentes eran demasiado gruesas, y las retiraron y dejaron la parte más fina -y cara- del polvo. Las partículas que quedaron respetan la naturalidad y dan un poco el brillo del rostro", comenta la maquilladora, que recomienda la marca Make Up Forever.

A partir de una edad las 'BBCreams' son muy cómodas, pero quizá no son lo suficiente cubrientes para los problemas de pigmentación. "Si una tiene arrugas, deberá decantarse por una base más hidratante, y para la que tenga manchas, la 'BBCream' será totalmente insuficiente. Necesitará un fondo que cubra", asegura Pérez.

Corinne está a favor de utilizar el colorete, pero mejor si es en crema, "para dar jugosidad". Según explica la experta en maquillaje, "va a quedar más natural". Por el contrario, cuando hay arrugas, el colorete en polvo seca la arruga y cuesta más difuminarlo. En crema se integra más con el color de la piel.

Para hacer brillar los ojos, "lo que mejor funciona es dibujar en condiciones la ceja", dice Pérez. La ceja le va a dar tono a la mirada, fortaleza, alegría, energía... "Con la edad, la ceja [los músculos por encima del arco superciliar] va cayendo, y el vello también. Por eso muchas mujeres se tatúan la ceja, y si no, la rellenan con lápiz", explica.

Hay un montón de variedad de sombras para el párpado. "Tienes mate, mate con algo de brillo para potenciar el mate, las satinadas, las irisadas. Las que son totalmente mate no las recomiendo, ni tampoco las que llevan mucho brillo; mejor elegir un mate satinado", asegura la experta, que también ofrece este truco: "Si al tocarlas se notan ásperas es que tienen mucho pigmento, y estas, encima de un párpado arrugado, quedan fatal. Hay que mirar que la textura sea fina con un toque satinado, como de piel ligeramente húmeda".

"Con la menopausia, casi el 50% de las mujeres pierden pelo, padecen alopecia. También pierden cejas, pestañas... Hay productos para fortalecer la pestaña y funcionan muy bien", argumenta Corinne. Ella también aconseja utilizar las pestañas de grupo (mechoncitos), porque "se aplican muy fácilmente y son muy favorecedoras". Y, por supuesto, la máscara de pestaña, en la línea superior. "Si en la parte de abajo no hay muchos pelitos, mejor no usar rímel, pues queda horroroso", según la maquilladora.

"Como la teoría de Newton, la boca pierde jugosidad, volumen y las comisuras caen. Es lo que le pasa también a los músculos de las mejillas, que pierden fuerza y la piel se hace más flácida. Esto hace que la comisura se retraiga para adentro y baje. Es indispensable aquí el perfilador, para levantar esa comisura. Mejor un lápiz 'waterproof'. Con él podemos cubrir todo el labio, y luego rematarlo con un 'gloss'. Y dará un efecto natural", remata Corinne.