¿Por qué molestan tanto las tetas?

 Hay quién se escandaliza por la posibilidad de que una mujer pueda subirse a un escenario y enseñar una teta. Porque este es el problema: cuando una persona se identifica como mujer, sus pechos pasan a estar sexualizados automáticamente. Es lo que pasa con los niños pequeños: en el momento en que decimos que una criatura de 3 años es una niña (según los estereotipos cisnormativos) ya le ofrecemos biquinis y bañadores para que tape su torso.

¿Y qué diferencia hay entre el pecho de una criatura que ha nacido con pene y el de una que ha nacido con vulva cuando tienen, por ejemplo, tres años? Ninguna. ¿Y por qué a una se le ofrece un bañador que tape el tronco y a la otra no? Por la sexualización. Las niñas aprenden, desde muy pequeñas, que sus pechos no se pueden enseñar.

“Pero las niñas quieren llevar biquini”, pensará alguien. ¡Está claro! Quieren llevar bikini porque ven a las chicas y a las mujeres más grandes que lo hacen y ellas las quieren imitar. Porque los referentes que ven también llevan y ellas no se quieren quedar atrás. Pero con tres u ocho años no tienen ni idea del simbolismo que hay escondido detrás de este acto que parece pequeño pero que esconde mucho más.

Volvemos a la música. Hemos perdido la oportunidad de llevar las reivindicaciones de esta gran canción por toda Europa pero ha abierto el tema de debate aquí y esto ya es un beneficio muy grande. El trabajo que han hecho Rigoberta Bandini con la letra de la canción y todo el equipo con la escenografía durante la actuación del Benidorm Fest es brutal. Lleno de simbolismo que me gustaría comentar.

Navegando por Tik Tok me encontré a Alex Knowles, que ha hecho una lectura fantástica del significado de toda la escenografía de la actuación y me gustaría compartirla con vosotros. Alex cree que la actuación es una auténtica obra de arte y destaca diferentes puntos:

•  El traje de novia: para criticar que todavía existe esta idea de que te tienes que casar para poder ser madre.

•  El traje tapa el cuerpo: simboliza la censura a la hora de mostrar cualquier parte del cuerpo femenino mientras que en el escenario también hay un par de chicos que están sin tapar. Más adelante se saca el traje para liberarse.

•  Las gafas de sol: representan la invisibilización de la mujer.

•  Las otras chicas: en un primer momento aparece su prima que representa el apoyo entre mujeres y, por eso, se quita las gafas y el velo. Ya no se quiere tapar y ahora ya ve. Las otras bailarinas que aparecen se ponen en posición de sororidad y lucha entrelazando los brazos.

•  Levantar el brazo: mientras Rigoberta se mantiene en medio, el resto del grupo baila a su alrededor y ella levanta el brazo como en el cuadro ‘La libertad guiando el pueblo’ de Delacroix.

•  Revolución y censura: mientras dos bailarinas saltan y bailan simbolizando la libertad, las otras tres personas están rezando en representación de la censura sobre la desnudez femenina.

•  Camisetas arriba: las bailarinas y los bailarines se suben las camisetas, se tapan la cara y muestran un top que tapa los pechos. De este modo casi es imperceptible reconocer qué pecho son femeninos y cuáles masculinos, así no puedes saber cuáles son los pechos que te tienen que ofender.

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Esta lectura de la actuación de la canción ‘Ay mamá’ me parece una delicia que nos puede hacer reflexionar sobre tantos machismos cotidianos que tenemos integrados, que parecen poco importante pero que alimentan la parte más visible y más violenta del patriarcado.

Como siempre, parece que hay alguien al que le ofenden las tetas y quizás ya empieza a ser hora que veamos los pechos como lo que son: una parte más de nuestro cuerpo, independientemente de la talla que tengamos y de qué tengamos entre las piernas.