Modelo comercial en auge

Shein estudia salir este año a bolsa en Londres y no en Nueva York

Shein y el comercio electrónico abocan a la desertización de los municipios

Shein compra Missguided y afianza su expansión en base a adquisiciones

Shein y el fin de los probadores en las tiendas

Una tienda efímera de Shein.

Una tienda efímera de Shein.

Eduardo López Alonso

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Shein, el 'marketplace' chino de productos de moda, belleza y estilo de vida, estudia salir empezar a cotizar en la Bolsa de Londres. Ante los obstáculos que se está encontrando para una salida a bolsa en Nueva York. Fuentes consultadas por Bloomberg apuntaron que Shein, fundada en China, pero actualmente con sede en Singapur, ha iniciado contactos serios para elegir la opción de Londres, ante la posibilidad de que la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de Estados Unidos no apruebe su salida a bolsa. En caso de llevarse a cabo finalmente esa estrategia, sería la mayor salida a bolsa de una empresa china desde el debut en Wall Street de Didi, que llegó a la Bolsa de Nueva York en 2021, valorada en más de 68.000 millones de dólares (62.735 millones de euros).

El ministro de Finanzas británico, Jeremy Hunt, ha mantenido conversaciones con el presidente ejecutivo de Shein, Donald Tang, informa Reuters. La oferta pública inicial de Shein, que se ha focalizado en la venta de prendas de moda a precios ultrabajos en más de 150 países, podría ser la segunda mayor de la historia de la Bolsa de Valores de Londres, divulgó Sky News, citando a un banquero de mercados de capitales.

El modelo Shein

Shein es un monstruo para el sector textil y de la moda a escala internacional. Ha introducido nuevos esquemas de valor precio de las prendas, aprovechando los modelos desarrollados por firmas como Inditex, Mango o H&M, pero introduciendo elementos tecnológicos todavía más avanzados y plantas de fabricación junto a los centros de decisión. La web de Shein es un ejemplo claro del modelo 'fast fashion' llevado al límite, con más 'fast' y menos 'fashion', haciendo del precio el elemento fundamental para atraer compradores. La habilidad de Shein fue centrarse en productos concretos de moda que han adolecido siempre de precios elevados, especialmente la ropa de fiesta o los trajes de baño, por ejemplo, para después abordar una gran diversificación de su oferta. Actualmente pugna por ser un Aliexpress o Amazon generalista, con predominio de producto chino a precios de derribo.

Los competidores de Shein consideran que es una firma tecnológica más que de moda, al exprimir al máximo la información derivada de las ventas para acelerar la rotación de la oferta, que no está lastrada por el precio millonario de tiendas o costes salariales, salvo establecimientos efímeros que abren solo unos días. Recientes estudios achacan a Shein el ser uno de los culpables de la desertización comercial de los municipios en España. 

Temu, otro contendiente

Shein ha intensificado su apuesta por el mercado británico para hacer frente a la competencia de Temu, del grupo Pinduoduo, una plataforma de comercio electrónico al más puro estilo Aliexpress que ha replicado el modelo de Shein de vender productos baratos de fabricantes chinos a consumidores occidentales. Temu ha logrado en solo un año en EEUU una cuota similar a la de Shein. A finales del año pasado compró en Reino Unido Missguided, propiedad de Frasers Group. También mantiene una alianza con Forever 21, una marca de moda rápida muy popular entre los compradores de la Generación Z, que pretende ampliar su presencia en tiendas físicas. Forever 21 está ubicado en más de 572 ubicaciones a nivel mundial y en línea.

Shein factura del orden de 23.000 millones de dólares. En la práctica, vende el doble que Inditex en internet, pero factura la mitad. Es una idea de su capacidad, estilo y potencial en torno a la moda en internet. Y esa tendencia tiende a consolidarse. Mientras, las grandes firmas de moda hacen esfuerzos para reposicionar sus marcas y alejarse del 'sanbenito' del 'fast fashion' y conquistar nuevos aromas de marca con mayores ínfulas, origen occidental, más calidad y precios más altos. También con la introducción de segundas marcas de mayor calidad.

El Gobierno británico no ha querido ni confirmar ni desmentir los contactos de manera oficial, pero la salida a bolsa de un gigante como Shein en Londres sería un gran espaldarazo para un mercado londinense de renta variable que ha ido a menos tras el Brexit.

Aunque es lógico que Shein mantenga EEUU como primera opción, por la importancia del mercado y la posibilidad de mayor volumen de negociación, si se mantienen los obstáculos legales y las reticencias estadounidenses a las empresas asiáticas la opción londinense podría ser aprovechada. Las bolsas de Hong Kong o Singapur son también opciones posibles. .

A finales del pasado año, Shein habría registrado una solicitud confidencial para cotizar en Estados Unidos a través de una oferta pública inicial que podría tener lugar a lo largo de 2024, según indicaba entonces la cadena CNBC. Una tramitación confidencial permite a las empresas comunicarse con la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) y realizar los ajustes necesarios en la presentación al margen del escrutinio público. De tal modo, el folleto de la oferta sólo se haría público una vez que la empresa esté lista para dar el salto al 'parquet', cuando también se publicarán las comunicaciones con la SEC y cualquier ajuste en la documentación.