Disciplina presupuestaria

España propone una reforma más dura de las reglas fiscales para lograr el acuerdo de Alemania

Nuevas reglas fiscales europeas: qué son y cómo afectarán a España

Alemania y Francia chocan por la reforma de las reglas fiscales que propone Bruselas

EU Council Eurogroup finance ministers meeting in Brussels

EU Council Eurogroup finance ministers meeting in Brussels / EFE / EPA / OLIVIER HOSLET

Rosa María Sánchez

Rosa María Sánchez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La reforma de las reglas fiscales -para actualizar las reglas de disciplina presupuestaria en la Unión Europea- entran en la recta final con la vista puesta en lograr cerrar un acuerdo político en la reunión ministros de Economía y Finanzas (Ecofin) del mes de diciembre. De momento, la ministra de Economía en funciones, Nadia Calviño, -en representación de la Presidencia española de turno de la Unión Europea durante este semestre- puso este jueves sobre la mesa del Ecofin una propuesta de consenso, a modo de "zona de aterrizaje" -en expresión de la propia Calviño-, que endurece el texto inicial que la Comisión Europea presentó en abril y que pretende servir de pista donde resolver el desacuerdo político entre Francia y Alemania sobre el diseño de la nuevas reglas fiscales.

Calviño lleva al Ecofin un documento que abre la puerta a exigir un ajuste presupuestario mínimo a los países con deuda superior al 60% del PIB

"Esta zona de aterrizaje que hemos propuesto garantiza una reducción gradual y consistente de la deuda pública. También permite generar un espacio fiscal para responder a nuevas crisis e incentiva reformas clave en áreas prioritarias para la Unión Europea", dijo Calviño en la rueda de prensa posterior a la reunión del Ecofin, antes de admitir que "todavía queda muchísimo trabajo por hacer". "Creo que se está surgiendo un amplio acuerdo sobre los elementos centrales del marco, los mecanismos que deben aplicarse y las salvaguardas", apuntó la ministra, y señaló que ahora "lo que queda por hacer es afinar los detalles y la calibración, por lo que es necesario empezar a trabajar en el texto jurídico".

La clave está en las salvaguardas

Nadia Calviño explicó que la propuesta que la Presidencia española ha puesto sobre la mesa este jueves -después de haber intensificado los contactos con las capitales europeas en los últimos 15 días, con más de 50 reuniones- conserva el núcleo de la iniciativa de la Comisión Europea: que cada país elabore su propia senda de ajuste a medio plazo (a cinco o siete años). La novedad ahora reside en las "salvaguardas" que han de garantizar que esas sendas de ajuste individualizadas cumplen unos mínimos exigibles -capaces de tranquilizar a la más estricta Alemania- y eso es lo que España ha endurecido ahora en su "zona de aterrizaje", para lograr que la reforma sea aceptada por Alemania.

La palabra "salvaguarda" se convierte así, a partir de ahora, en la clave de la negociación pendiente. La ministra española en funciones no explicó el contenido de esas salvaguardas, pero sí se refirió a que afectan al déficit y a la deuda y dejó claro que su cuantificación es, precisamente, lo que queda por resolver (la "calibración").

En la propuesta legislativa que la Comisión Europea presentó en abril, Alemania ya logró colocar una salvaguarda: el texto impuso un ajuste presupuestario mínimo anual del 0,5% del PIB para los países con un déficit superior al 3% del PIB.

La propuesta que España ha presentado este jueves al Ecofin añade ahora una nueva salvaguarda, relativa a la deuda. Aunque Calviño no la detalló, fuentes conocedoras del documento explican que esa salvaguarda obligaría a un ajuste mínimo anual también a los países con una deuda pública superior al 60% del PIB. En esta situación se encuentran, sobre todo, Grecia, Italia, Portugal, Francia, España y Bélgica (con datos referidos a 2022).

"La propuesta de 'zona de aterrizaje' mantiene el espíritu de la de la Comisión Europea. Lo que hace es desarrollarla y ajustarla más para llegar al acuerdo político necesario. Una novedad que se está debatiendo ahora es la salvaguarda del déficit. Todo depende de cómo se calibre esa salvaguarda, pero eso está por discutir", afirmó el vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis para resumir el estado de la cuestión.

Negociación franco-alemana

"Calibrar" es la segunda palabra clave en la negociación pendiente. Y aquí entran las negociaciones abiertas entre Francia y Alemania, que simbolizan las dos posiciones opuestas en la reforma de las reglas fiscales. "Ahora se trata de números, no solo de instrumentos", resumió el ministro alemán de Finanzas, Christian Lindner, este jueves, antes de la reunión del Ecofin.

Los ministros de Finanzas de Francia, Bruno Le Maire, y de Alemania, Christian Lindner, se mostraron optimistas sobre la posibilidad de cerrar un acuerdo franco-aleman que permita desbloquear la reforma de las reglas fiscales. Ambos ministros ya han mantenido una reunión esta semana en París para avanzar en el acuerdo y han anunciado este jueves que mantendrán otra en Berlín a final de mes.

"Una iniciativa franco-alemana podría conducir a un entendimiento mutuo entre todos los estados miembros de la UE", dijo el ministro de Finanzas alemán. "Es un progreso que se reconozca la idea de salvaguardas y puntos de referencia en relación con el ratio deuda/PIB y los déficits anuales, pero ahora lo que hay que considerar es el nivel de ambición, ahora se trata de hablar de números no solo de instrumentos", añadió.

"Las discusiones son positivas y constructivas entre Christian (Lindner) y yo sobre las nuevas reglas", expresó el francés Le Maire, quien también subrayó la necesidad de lograr un "buen equilibrio" entre la "estabilidad financiera" y también las inversiones que son "indispensables" para el crecimiento económico.

Calendario

El resultado de estas conversaciones se llevará a la mesa de una reunión extraordinaria del Ecofin que, según anunció Calviño, se convocará en los últimos días de noviembre, como paso previo a la reunión ordinaria de diciembre, donde, según el deseo expresado por todos los ministros, sería deseable asumir un texto legal para la reforma de las reglas fiscales, antes de que acabe el año.

Este es el calendario que Calviño detalló en la rueda de prensa posterior a la reunión del Ecofin, donde respondió que, como presidenta de turno de la UE, no se siente desautorizada por el hecho de que el acuerdo final dependa de lo que acuerden Francia y Alemania. "Al contrario. Encuentro muy valioso que Francia y Alemania estén intentando apoyar los trabajos de la Presidencia española", dijo.