CÍRCULOS CONCÉNTRICOS

Arranca el Fútbol Club Barcelona-Goldman

El banco de inversión estadounidense, uno de los más influyentes del planeta, se convierte en el auténtico maestro de ceremonias del nuevo Barça. Nada ocurrirá en el club sin su visto bueno.

Una imagen del proyecto de reforma del Camp Nou.

Una imagen del proyecto de reforma del Camp Nou.

Martí Saballs

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"¿Que el Barça necesita generar ingresos extraordinarios porque no se le permite jugar la Champions debido al caso Negreira y se dejan de ingresar los cien millones previstos por llegar a cuartos de final? Tenemos cantidad de opciones para lograrlo. De lo más insólitos". ¿Ejemplos? "Jugar bolos de cinco partidos en un país exótico. ¡Pero si Cristiano Ronaldo gana 180 millones por temporada en Arabia Saudí". Hay euforia en la casa blaugrana por haber cerrado en el último minuto de la prórroga el acuerdo de financiación del Espai Barça. Tanta es la euforia que en el club proyectan lograr mil millones de ingresos en cinco años. ¿Y Messi? Eso esperan, su regreso, que depende de la decisión del jugador y de LaLiga, y que podría generar renovada ilusión y nuevos ingresos. ¿Vender algunos de los jóvenes jugadores actuales (Pedri, Gavi, Ansu, Balde), potenciales estrellas de primer nivel? Todo cabe, aunque no sería el recurso de urgencia.

Si en algún lugar se ha recibido con alivio el anuncio de que el Barça obtendrá los 1.450 millones de euros para financiar el Espai Barça es en Turquía. La constructora Limak ya ha recibido la confirmación oficial del club. Hay vía libre para empezar la construcción a partir de mediados de junio. Ese mes está previsto que lleguen las grúas gigantes procedentes del aeropuerto de Kuwait, que acaba de construir Limak. La presencia de ingenieros de esta compañía en Barcelona ya ascienden a 45. Tal como señaló la presidenta de Limak, Ebru Özdemir, en una entrevista exclusiva a Activos, de Prensa Ibérica, la empresa se compromete a terminar la primera fase de la construcción del nuevo Camp Nou en noviembre de 2024. Este mes volvería a jugar el primer equipo con un 50% de capacidad de espectadores. 

El Barça espera concretar en los próximos días los detalles del proyecto de financiación del nuevo estadio. De los veinte inversores internacionales que pondrán el dinero, una tercera parte de ellos serán bancos -fundamentalmente Goldman Sachs y JP Morgan a título propio- y el resto serán grandes aseguradoras internacionales, entre ellas la alemana Allianz, una de las copropietarias de la fundación que controla el Bayern de Munich y da nombre a su estadio. 

Del 5% al 6% de interés

Respecto al inicio de las negociaciones con los potenciales inversores a principios de año, los cambios han sido de detalle respecto a lo anunciado inicialmente. Junto al caso Negreira, el aumento de los tipos de interés por parte de los bancos centrales ha tenido un efecto inmediato en la rentabilidad que se compromete a pagar el Barça a los prestamistas. De un 5% inicial a una media que en el primer tramo de la deuda, a pagar en cinco años, se ha pasado a cerca del 6%. Fuentes del club avanzan que hasta 2050, fecha prevista de cancelación del deuda, los tipos irán adecuándose a la situación del mercado y a la evolución del club. El 16 de marzo la agencia de calificación KBRA retiró por sorpresa de su web el informe de calificación de la deuda del Barça a la espera de conocer todos los detalles de la financiación. Hasta entonces, los ratings estaban valorados en BBB+, ligeramente por encima del grado considerado de mayor riesgo o especulativo. Una duda que se despejará en breve es si KBRA emitirá la calificación o será una de las tres grandes agencias, que copan el 95% del mercado: S&P, Moody’s o Fitch.

¿Y Goldman Sachs, el banco coordinador de la operación? Tendrá cogida a la actual y próximas directivas del Barça por la corbata, si aún se llevan, para las próximas décadas. Para un banco fundado en 1869 por un inmigrante de origen alemán (Marcus Goldman), que heredó su hijo (Henry Goldman) y su yerno (Samuel Sachs), el Barça es una pieza más de su estrategia de diversificación en el sector de ocio y entretenimiento. Acostumbrado a financiar estadios como el de fútbol americano de Los Ángeles Rams (2.500 millones) la cifra es para ellos una pieza menor económicamente hablando. Por ejemplo, al mismo tiempo que estaba buscando inversores para financiar el nuevo Camp Nou, levantaba mil millones de euros para invertir en plantas de generación de energía por biometano en España a través de su sociedad Verdalia.

El Barça no será una SA

Fuentes cercanas a los inversores señalan que el Barça no desaparecerá, ni necesita convertirse en SA controlada por una Fundación, como el Bayern. Que su valor real, según el mercado especializado en el sector deportivo es de 4.000 millones. Tampoco ha hipotecado el campo ni los terrenos. Eso sí, tiene un activo que es una garantía ante cualquier problema: Goldman Sachs controlará y aprobará cada movimiento. Salvo uno: los goles.