Topes a los precios

Garamendi, sobre la cesta de la compra de Yolanda Díaz: "Parece mentira que un miembro del Gobierno promueva un cártel"

La patronal de la distribución tilda la medida de "ocurrencia", dice que es "inaplicable" y pide una "relajación" de normas que incrementan sus costes

Antonio Garamendi.

Antonio Garamendi.

Sara Ledo

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El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha vuelto a calificar de "programación soviética" la propuesta de la vicepresidenta primera y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, de establecer topes a los precios de los alimentos con una cesta de la compra de productos baratos y ha acusado a Díaz de promover acuerdos entre empresas para restringir la competencia. "Parece mentira que un miembro del Gobierno promueva un cártel", ha advertido Garamendi, en la clausura de la Asamblea Anual de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED), que agrupa a grandes supermercados como Carrefour, Costco, Eroski, Alcampo o El Corte Inglés.

No ha tenido muy buena acogida la propuesta de Díaz. Los grandes establecimientos, pequeños y medianos la rechazaron de pleno y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) salió en medio del debate, con una rapidez poco habitual en el organismo, para advertir de que poner precios máximos a los alimentos está prohibido por ley. Tanto la Ley de defensa de la competencia como el Tratado de funcionamiento de la Unión Europea "prohíben expresamente los acuerdos o recomendaciones de fijación de precios u otras condiciones comerciales que restrinjan o falseen la competencia".

En este sentido, Garamendi, que por ahora es el único candidato en las elecciones en la CEOE del próximo 23 de noviembre, ha insistido en que "es increíble que en un país moderno de Europa se plantee" topes de precios. Y si no hay tope, ha venido a decir el empresario, el Gobierno pide a las empresas precios bajos para mejorar su "reputación", algo que ha calificado de "peligrosísimo". "Aquí la culpa es de las empresas y de los empresarios, la responsabilidad es de las empresas y de los empresarios y esto es un problema de reputación. Cuidado. Es peligrosísimo decir eso cuando las empresas estamos trabajando permanentemente, lo que no puede ser es dañar la propia imagen de las empresas", ha agregado.

Y si Garamendi se mostró así de vehemente con Díaz y su cesta de la compra, no fue menos el presidente de Anged, Alfonso Merry del Val, quien calificó la medida de "ocurrencia inaplicable". "La realidad es que la distribución es un sector responsable y eficiente: las empresas ya llevan meses realizando enormes esfuerzos para contener la escalda de costes que sufre toda la cadena agroalimentaria", ha indicado Merry del Val. El dirigen de la gran distribución puso como ejemplo que la variación media del IPC de los alimentos en los últimos meses ha sido del 6,5%, casi 7 décimas inferior al IPC general.

"La tentación populista de convertir al empresario en un chivo expiatorio de los males de la economía o en un comodín del que seguir extrayendo recursos es una apuesta de alto riesgo", ha indicado Merry del Val en un discurso prácticamente dedicado a esta propuesta y a "algunas políticas de la Administraciones que están acelerando la espiral de costes".

En este punto, Merry del Val ha recordado que el coste regulatorio para el comercio con el covid creció en 1.774 millones de euros, como consecuencia de la "hiperegulación", según estimaciones de la CEOE. "Esa tendencia no ha cesado en el último año", ha agregado, gracias a una "treintena de medidas que encarecen sus costes". Entre ellas, ha citado, más impuestos y cotizaciones, nuevas obligaciones para el ejercicio de su actividad, importante requerimientos de inversión para adaptar su negocio a la nueva regulación y altos costes de transacción ocasionados por la complejidad y fragmentación de las normas", ha indicado.

Así, desde el sector reclaman una revisión de todas estas normas, así como "medidas que reduzcan los costes de la energía" y evitar nuevos impuestos, "en particular, aquellos impuestos que encarecen los procesos de producción de los productos básicos, como los alimentos", generar incentivos para la modernización de las empresas o rebajas de impuestos para mejorar la renta de los hogares.