Hacia las baterías casi interminables

La ‘ansiedad por la autonomía’ es el miedo de los conductores de vehículos eléctricos a quedarse "tirados" y supone el mayor lastre al despegue de las ventas. El Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas) trabaja en el proyecto Smart5G, un novedoso sistema seguro, inteligente, eficiente y ligero que permite reemplazar los módulos de batería descargados por baterías ya cargadas y, de esta manera, evitar los tiempos de espera de recarga. 

Este proyecto, financiado por la Agencia Estatal de Investigación (AEI), impulsa el diseño y desarrollo de una estación de recarga y sustitución de baterías para la movilidad ligera. En concreto, se trata de un sistema que facilita el intercambio rápido de baterías mediante la carga con energía solar y predice el consumo gracias al uso de algoritmos de Inteligencia Artificial (IA). Además, el proyecto incluye el desarrollo de una innovadora carcasa de batería plástica que aumenta la autonomía del vehículo al rebajar su peso en comparación con las carcasas metálicas habituales, lo que reduce los costes y el consumo energético, así como la huella de carbono.

La investigadora de Aimplas Begoña Galindo subraya que los compuestos plásticos "pueden desempeñar un papel clave en la industria del siglo XXI ya que ofrecen grandes ventajas en términos de peso reducido, rigidez y resistencia comparable a los materiales metálicos. Por ello, la nueva generación de coches eléctricos está apostando por el uso de estos materiales plásticos, que hacen posible un diseño libre y una reducción de peso de alrededor del 40%".

Begoña Galindo incide en que la electrificación es "una prioridad estratégica a nivel local, nacional y europeo. Es imprescindible impulsar nuevas soluciones tecnológicas que garanticen una movilidad segura, conectada e inteligente, aplicada tanto a vehículos individuales como de reparto, y que reduzca las emisiones de CO2". El proyecto de Aimplas cuenta con la ayuda de los fondos europeos y llega en un momento en el que Valencia se va a convertir en un referente del sector con la gigafactoría de baterías de Volskwagen en Sagunt.

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