La sociedad civil catalana pide al Gobierno que acabe con el déficit endémico en infraestructuras

El mensaje que la sociedad civil catalana --administraciones y agentes sociales y económicos-- ha transmitido este jueves al Gobierno central ha sido unánime: es imprescindible que el Estado resuelva el déficit  inversor endémico que arrastra Catalunya en los últimos 30 años. Así se ha puesto de manifiesto en las intervenciones de responsables empresariales, sindicales e incluso de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona, en el acto organizado por Foment del Treball con el lema 'Construyamos puentes con las infraestructuras', clausurado por el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos.

La sociedad catalana reclama acabar con el maltrato inversor y la respuesta del Gobierno, en boca Ábalos ha sido clara y conciliadora: "Abrimos una nueva etapa de diálogo y entendimiento entre todas las administraciones y Catalunya". Así se ha expresado en la clausura del acto reivindicativo. Ha recordado, sin embargo,  que "la falta de empatía y entendimiento" a veces ha ocasionado un desperdicio de energía, y ha defendido "el diálogo como método para afrontar los problemas", en un momento en el que otros apuestan por la confrontación.

Una buena sintonía que todavía debe trasladarse a acciones concretas más allá del acuerdo para el acceso de alta velocidad a los puertos de Barcelona y Tarragona y la cesión del edificio de Correos de la Via Laietana de Barcelona al Ayuntamiento para el desarrollo de un 'hub' tecnológico. De hecho, la lista de agravios es suficientemente larga y se han encargado de enumerarlas Foment del Treball, Pimec, la Cambra de Comerç, el Cercle d'Economia y los sindicatos UGT y CCOO de Catalunya. En sus intervenciones han reclamado a Ábalos, abordar "el déficit de infraestructuras" que consideran que sufre la comunidad: 28.000 millones de euros, según los cálculos realizados por Foment del Treball, relativos a a los últimos 10 años. Razón por la cual, la patronal, a través de su vicepresidente, Joaquim Llansó, se ha encargado de reclamar una inversión anual de 5.500 millones de euros en infraestructuras en Catalunya para cumplir con  la ratio del 2,2% del PIB que se aplica en Europa, y sumó unos 2.000 millones anuales durante 10 años para enjugar el déficit estructural

"Cerrar la etapa negra"

Durante el acto, los diferentes ponentes se han referido a los fondos de reconstrucción europeos para "poner al día" las infraestructuras de Catalunya y culminar proyectos pendientes desde hace años. Josep Sánchez Llibre, presidente de Foment, ha confiado en que con el acto de este jueves "se cierre la etapa negra de los últimos años" en la que considera que ha habido un maltrato a las infraestructuras catalanas por parte de los Gobiernos centrales y la Generalitat.

Sánchez Llibre ha pedido que se contemple el traspaso de 'Rodalies' a Catalunya y "una evolución positiva de la inversión en infraestructuras para corregir el déficit de infraestructuras". De hecho, ha avanzado la cercanía de un acuerdo entre la 'conselleria' que dirige Damià Calvet y el ministerio. las dos partes tienen previsto un encuentro esta tarde para abordar el tema. Calvet ha sostenido que la Generalitat y el Ministerio comparte el objetivo de mejorar este servicio y trabajar para completar y ampliar el traspaso acordado". 

Ha habido coincidencia en el diagnóstico entre el presidente del Cercle, Javier Faus, el de la Cambra, Joan Canadell, el de Pimec, Josep González, y los secretarios generales de CCOO y UGT, Javier Pacheco y Camil Ros, así como por parte de la administración catalana. También se producen un pronunciamiento unánime respecto a  que se abre una oportunidad inmejorable con el desarrollo y aplicación de fondo europeo de recuperación, presentado el miércoles, por el Gobierno. Para el líder de CCOO, su utilización debe contemplar que "en un momento de crisis hay que salir con el impulso de un nuevo modelo productivo", algo que va más allá de las propias infraestructuras, mientras que para el primer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, "no solo hay que fijarse en las infraestructuras. La sostenibilidad y equidad son parte de los elementos básicos que hay que cumplir. Las infraestructuras energéticas son claves".

El 'conseller' Calvet defendió que la nueva inversión debe contemplar "la revolución tecnológica y una transición hacia las energías renovables, transición hacia la economía circular y digitalizada".  Lo que plantea representa tan solo el 12% y el 9% respectivamente del plan de inversión del Gobierno. "Hay que hacer un esfuerzo para aumentar ese porcentaje", reivindicó.