efectos de la pandemia

El Mobile de BCN se aplaza de marzo a finales de junio

Los organizadores del MWC aseguran que las nuevas fechas harán más seguro el certamen

John Hoffman

John Hoffman / periodico

Agustí Sala

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La evolución de la pandemia del coronavirus no deja de impactar en la economía y causar estragos. GSMA, la organización del Mobile World Congress (MWC), que ya canceló la edición de este año antes poco antes de que estallar la pandemia en Catalunya, ha pospuesto la edición del salón que está prevista entre el 1 y el 4 de marzo. 

La opción ha sido trasladarlo al verano, del 28 de junio al 1 de julio como consecuencia de la evolución del covid-19. El consejero delegado de GSMA, John Hoffman, lo ha anunciado hoy en Barcelona. La organización da prioridad "a la seguridad" de la convocatoria, ha explicado. La edición del 2021 será presencial, pero tendrá una parte virtual, lo que aumentará la posibilidad de audencia, ha explicado.

"Hacer este cambio de fechas "es lo correcto", ha sentenciado durante la explicación del cambio de fechas que, ha asegurado, es una decisión que se tomó el día anterior. Todas las administraciones y entidades implicadas han valorado la decisión tomada por GSMA y subrayan el hecho de que esté previsto celebrar el salón. Hoffman dijoi contar con el apoyo de todas las administraciones.

El 'conseller' de Polítiques Digitals, Jordi Puigneró, ha asegurado que el aplazamiento permitirá que haya más garantías sanitarias para desarrollar con normalidad evento y un mayor impacto económico.

Por su parte, el primer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, considera esta decisión "una buena noticia", dado que así se traslada "un mensaje a nivel internacional de confianza en la ciudad y de certidumbre".

En una línea similar se pronunció la alcaldesa de L'Hospitalet, Núria Marín, y el presidente de Fira de Barcelona, Pau Relat, que, a su vez, ha afirmado que la entidad "apoya plenamente" la decisión de la GSMA y ha reiterado que el objetivo es que la edición del 2021 sea "la mejor posible".

En este sentido, Hoffman ha afirmado que la edición del 2021 será, sobre todo, "brillante". El consejero delegado ha agradecido el apoyo de las distintas administraciones. "Cuando cancelamos la edición del 2020 desconocíamos qué sucedería", ha admitido, pero ha asegurado que cuentan con apoyos del 78% de sus 100 grandes clientes para la edición del 2021. Hoffman entiende que el aplazamiento permitirá llegar a más del 80%. Entre estos se encuentran Ericsson, Huawei y Nokia. También se ha mostrado convencido de que antes de la celebración de la feria en junio se habrán producido avances médicos y en materia de vacunas para combatir el covid-19.  

"Sabemos lo que hay que hacer y así lo haremos", ha subrayado Hoffman en cuanto a las medidas sanitarias que se deberán tomar para garantizar que la presencia de miles de congresistas en Barcelona el año que viene.Y ha insistido en que el Mobile World Congress de Barcelona seguirá siendo el "buque insignia" de los eventos que organiza por todo el mundo GSMA.  

GSMA, que también canceló las ferias en Shanghái (China) y Los Ángeles (EEUU) y las celebró de forma virtual, también ha modificado el calendario de estos eventos. 

Hace pocos días, los organizadores de ISE, la feria audiovisual más importante del mundo, que se estrenaba el año que viene en Barcelona procedente de Ámsterdam, decidieron trasladar de febrero a junio la celebración de esta muestra. La decisión se justificó en la necesidad de un "equilibrio entre salud y seguridad" como consecuencia de la evolución de la pandemia.

La edición del 2020 de la feria de móviles, la más importante del mundo, que debía celebrarse a finales de febrero pasado fue cancelada cuando aún no había habido casos de covid-19 en Catalunya. La organización optó entonces por la prudencia para evitar riesgos en una muestra que congrega a más de 100.000 personas y justificó la medida en motivos de "<strong>fuerza mayor"</strong> que luego se produjeron.

Declaración de pandemia

De hecho, tras la decisión de GSMA se fueron cancelando ferias y congresos no solo en España sino en todo el mundo hasta que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la pandemia. La idea de GSMA ha sido en todo momento mantener la edición del 2021, aunque sea cambiando de fechas por motivos relacionados con la crisis sanitaria. El consejero delegado de GSMA anticipó en julio pasado en una entrevista con EL PERIÓDICO que ya se había contratado el 80% de la superficie para la edición del 2021. Hoffman se ha reafirmado en la decisión que tomaron en febrero pasado.  

Como consecuencia de la cancelación de la edición del 2020, el MWC se celebrará en Barcelona un año más de los previstos por el contrato inicial, hasta el 2024. En abril GSMA y la fundación Mobile World Capital Barcelona, de la que forman parte el Gobierno central, la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y la Fira, llegaron a un acuerdo en este sentido.

Compensar pérdidas

El pacto fue ratificado en junio pasado por el Ejecutivo central y supuso «una reducción de precios para compensar las pérdidas por la cancelación de este año» según explicó la ministra de Hacienda y portavoz el Gobierno, María Jesús Montero. 

Según los términos del acuerdo, GSMA ofreció a la Administración General del Estado «una tarifa muy reducida» y en condiciones ventajosas para la edición del MWC del 2021 en compensación por los gastos a los que hubo que hacer frente en el 2020 y se amplió el periodo de celebración del congreso en Barcelona un año, más hasta 2024.

Por otro lado, la Fundación Barcelona Mobile World Capital, que integra a las administraciones públicas e instituciones que respaldan la celebración del congreso, renovó sus compromisos financieros con GSMA en el 2020. Esta aportación será devuelta en caso de que finalmente no pueda celebrarse la próxima edición en Barcelona en el 2021.

El compromiso público por parte de las administraciones asciende a 15 millones de euros (cinco millones cada una). El objetivo de la fundación es dar entrada a más socios (actualmente tiene desde Telefónica a CaixaBank) para que a medio plazo se produzca un reequilibrio entre las aportaciones públicas y privadas.

El contrato con Fira de Barcelona era hasta el 2023, pero gracias al acuerdo, se decidió alargarlo hasta el 2024. El salón del 2020 tenía que recibir más de 110.000 visitantes, lo que iba a suponer un récord. La cancelación de la edición de este año provocó un movimiento espontáneo, bautizado como <strong>Tech Spirit Barcelona</strong>, para cubrir el parte el vacío que provocó. El Mobile del 2020, que iba a tener lugar del 24 al 27 de febrero, suponía una aportación económica para la ciudad de casi 500 millones de euros.