Asepeyo aumenta sus ingresos el 9,4%, aupados por el aumento de obligaciones de los autónomos

La mutua Asepeyo cerró el ejercicio del 2019 con una facturación de 2.509,8 millones de euros, lo que supuso un incremento respecto al año anterior del 9,4%. Los ingresos de esta entidad colaboradora con la Seguridad Social se vieron impulsados, entre otros, por el descenso de la siniestralidad y la entrada en vigor de las nuevas obligaciones a nivel de cotizaciones para el colectivo de trabajadores autónomos. El número de trabajadores por cuenta propia cubiertos por Asepeyo durante el 2019 se multiplicó por cinco respecto al año anterior y, teniendo en cuenta también a los asalariados, la mutua dio cobertura a un total de 2,7 millones de trabajadores en activo.

El anterior Gobierno de Pedro Sánchez, con la entonces ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, a la cabeza, pactó con las asociaciones de autónomos un aumento de las cotizaciones obligatorias de los trabajadores autónomos. A partir del 1 de enero los afiliados al RETA tenían la obligación de cotizar por el cese de actividad o por la contingencias por enfermedad común. Una obligación legal que ha contribuido a que un total de 461.637 trabajadores autónomos pasaran a ser usuarios de los servicios de Asepeyo, cuando en el curso pasado fueron 89.438.

Del total de ingresos que obtuvo Asepeyo durante el ejercicio del 2019, cerca de la mitad, un total de 1.351 millones, correspondieron a cotizaciones de contingencias profesionales. Estas aumentaron el 16,8 % respecto al año anterior. El resto de ingresos directos provinieron de las contingencias comunes (685 millones de euros) y el cese de actividad de los autónoms (39 millones).

Siniestros al alza, siniestralidad a la baja

El aumento del número siniestros, que no de la siniestralidad, es otro factor que ha contribuido a engrosar el balance de la mutua colaboradora con la mayor cartera de clientes de España. En el 2019 se registraron en toda España un total de 650.602 siniestros que causaron baja, el 5,4% más que en el año anterior; según los datos oficiales recopilados por el Ministerio de Trabajo. No obstante, el empleo creció en mayor proporción que la siniestralidad, lo que provocó que tanto el índice de siniestralidad (-1,2%), como el de siniestralidad mortal (-14,3%) disminuyeran.

En lo que va del 2020, en España se han registrado entre enero y mayo un total de 180.974 accidentes laborales que causaron baja. Dicha cifra constata una caída del 29,7% respecto a los números registrados en el mismo periodo del año pasado; marcada por el descenso de la actividad económica fruto de la pandemia. Sí repuntó el número de accidentes mortales en los primeros cinco meses del año, que fue de 288 víctimas, el 15,2% más.