CORONAVIRUS

Benidorm: turistas 'go home'

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zentauroepp52819605 coronavirus benidorm200317125437 / Miguel Lorenzo

Nacho Herrero

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La ‘capital’ del turismo en España echa el cierre sin saber cuándo podrá levantar la persiana. Las siempre bulliciosas calles de Benidorm están vacías y la ciudad, en marcha noche y día desde hace décadas, se encamina a una suerte de coma inducido después de que la patronal hotelera haya acordado el cierre de sus establecimientos este miércoles. Sólo hay ya un movimiento, el de la salida de los últimos visitantes que resistían a la crisis del coronavirus.

"La temporada de invierno, la Semana Santa, la damos por perdida. Si el 15 de junio pudiéramos abrir me daría por satisfecho", explica a EL PERIÓDICO Toni Mayor, presidente de HOSBEC, que agrupa al 70% de las camas de la Comunitat Valenciana. A última hora de la jornada el 95% de sus establecimientos había cerrado y la previsión es que el domingo sea el 100%.

El sector es el principal motor de la economía (según los últimos datos aporta al 12,3% del PIB y 2,6 millones de empleos, el 12,7 del total) y el impacto, advierte, será "brutal" pero será el mismo que "el de cualquier negocio que puedas pensar, excepto la alimentación todos tienen una ruina".

Las populares playas de Levante y Poniente de la capital de la Costa Blanca llevan días precintadas y los bares que en cualquier día de cualquier semana del año estarían llenos de ingleses bebiendo cerveza tienen bajadas las persianas. El confinamiento en el paraíso de la juerga tiene un punto extra de tristeza.

"Para el sector turístico el impacto será peor que el de una guerra o que la crisis de 2008, porque ahí la crisis que era financiera o inmobiliaria esto funcionaba pero esto funcionaba y en plena guerra los hoteles de Londres o Nueva York estaban abiertos. Esto es algo global y que afecta a todos los sectores", explica.

En su hotel apenas ya quedan ocupadas este martes una veintena de habitaciones de las casi cuatrocientas que tiene. Hace unas semanas la idea para estas fechas era estar casi llenos, como el año pasado. La asociación pidió hace días a sus socios que cerraran inmediatamente todas las zonas comunes excepto las imprescindibles para dar de comer a los clientes y estableciendo turnos y distancias de seguridad y ahora se gestiona un cierre ordenado.

Miedo al día después

Con la decisión tomada y ERTES masivos que puede afectar a más de quince mil trabajadores ya presentados,  la patronal empieza ya a mirar a un futuro lleno de nubarrones. "El dinero del sol y playa nacional, excepto Canarias, están del 15 de mayo al 15 de octubre, ahí están el 90 por ciento de los beneficios", recuerda. Por eso ese 15 de junio no lo ven tan mal.

Pero la preocupación no es sólo por ellos. "Nos da miedo el día después de todo esto, quién queda, cuántas líneas aéreas han quebrado, cuantos turoperadores quedan. Porque si no hay transporte no hay turismo, a pie no vienen, y en autobús o en coches la europa del norte no viene. Nos preocupan la mortandad de empresas clave para el sector", lamenta.

Sólo ve una solución. "El Estado y la UE deben sacar el ‘bazoka’, un helicóptero que lance billetes. Algo así se tendrá que hacer", apunta.

Convivencia imposible

Lo que también tienen claro es que con las medidas de confinamiento decretadas es imposible mantener abierto un hotel. Por eso ya varias cadenas hoteleras les han seguido y creen que el Gobierno acabará por decretar ese cierre. De momento, este martes el Govern balear ha pedido a los 25.000 turistas que quedan en las islas que se vayan.

"Riu o Iberostar han cerrado, pero no en Mallorca, han cerrado en todo el mundo. El cierre de la planta hotelera es mundial en occidente. No puedes tener abierto un punto como un hotel de mucha congestión, en comedores, en ascensores o en zonas comunes, y estar diciéndole a la gente que estén a un metro y medio o que no salgan de las habitaciones. No puedes dejar abiertas unas factorías de contaminación como son los hoteles", señala Mayor.

El inicio del confinamiento y el obligado cierre de bares y restaurantes desde la noche del sábado dejó algunas imágenes de tensión en la 'zona inglesa', en la que la Policía tuvo que intervenir ante el deseo de muchos de seguir celebrando el día de San Patricio. "La gente había pagado y había venido para divertirse y nadie les había avisado. Hay que ser comprensivos, si hubo alguna imagen inapropiada hay que perdonarla", apunta.

Decisión aceptada

En la asamblea que celebró el domingo HOSBEC no hubo voces disidentes en una asociación que reúne noventa de las ciento treinta mil camas de la Comunitat Valenciana. En Benidorm se juntan más de cuarenta mil y eso sin contar con los pisos turísticos que también se han vaciado a la carrera.

"Había que cerrar por corresponsabilidad, por conciencia social, por el bien de los trabajadores, de los clientes y de los ciudadanos de Benidorm. No podemos ser un punto de transmisión de la enfermedad. Seguro que va a haber orden gubernamental de cierre, pero llegará tarde", advierte.

Alertados por un informe de la Universidad de Harvard, los dueños de los hoteles ya vieron el jueves pasado "que esto se hundía" y empezaron a moverse con los turoperadores "y acertamos".