La obra nueva iniciada en Barcelona cae un 62% en el primer trimestre

La obra nueva iniciada en la ciudad de Barcelona cayó un 62% en el primer trimestre del 2019, mientras que la obra terminadas se redujo un 20% en el mismo periodo, según los datos de coyuntura del sector publicados este jueves por la Associació de Promotors de Catalunya (APCE). La menor producción inmobiliaria de la ciudad, que los promotores asocian con las medidas legislativas adoptados por las administraciones, principalmente con la decisión del Ayuntamiento de Barcelona de obligar a incorporar un 30% de vivienda social en todas las nuevas promociones por encima de los 600 metros cuadrados, ha tenido un efecto negativo igualmente en la producción del conjunto de la provincia de Barcelona que ha registrado una caída del 9,4% según los datos de la APCE a partir de los visados concedidos por el Col·legi d’Aparelladors. 

Estos datos muestran un ruptura de la tendencia alcista de la actividad del sector, ya que en general reflejan una caída del 5,2% en el primer trimestre, con respecto al mismo periodo del 2018, hasta alcanzar los 3.462 viviendas iniciadas. “No hace falta remarcar que se trata de una cantidad muy pequeña para las necesidades de un mercado todavía con recorrido”, destaca la APCE en su nota.  

Esta evolución era esperada por diferentes agentes del sector inmobiliario. Se trata de la reacción que sigue al incremento de demandas de licencias que se produjo en la última parte del pasado ejercicio a partir de que se diera a conocer la voluntad del Ayuntamiento de Barcelona de incorporar la medida del 30%. Los promotores quisieron anticiparse para eludirla. Pero una vez que ha entrado en vigor, han dejado de pedir licencias de obra en la capital catalana y se han mudado a otras poblaciones. Los municipios de las difrentes coronas metropolitanas son los únicos que registran incrementos de licencias de obras.

Producción alcista

Los promotores ponen de manifiesta que la producción de viviendas iba claramente en incremento aunque con cifras muy por debajo de las necesarias para atender la demanda. “La recuperación del sector hasta el primer trimestre de este año, era evidente y constante desde 2013”, señalan.  

En este sentido, agregan, “la preocupación por la reciente aparición de algunos tipos de medidas por parte de la Administración que penalizan a las empresas que tienen capacidad actualmente de aumentar la oferta de viviendas, pueda afectar directamente la actividad del sector y es en este primer trimestre del año con datos de los visados de inicio de obras donde se pone de manifiesto un cambio de tendencia de la producción de viviendas por primera vez desde el punto de inflexión de 2013”.  

Reconoce la APCE que “no estamos ante un resentimiento sustancial pero a pesar de ser leve (para el conjunto de Catalunya), la obra nueva ha sufrido un descenso, cuando los niveles de actividad siguen muy por debajo de la actividad considerada como óptima para cubrir las necesidades”.