acuerdo de reestructuración

CaixaBank pactan un ERE que prevé hasta 2.023 salidas voluntarias

La dirección de CaixaBank y los sindicatos llegan a un acuerdo para el ERE

La dirección de CaixaBank y los sindicatos llegan a un acuerdo para el ERE. . / periodico

Gabriel Ubieto / Max Jiménez Botías

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Después de cuatro meses de negociaciones, la dirección y los sindicatos --CCOO, con un 40,58% de la representación se ha desmarcado del ecuardo-- de <strong>CaixaBank</strong> han cerrado en la mañana de este miércoles un acuerdo sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que ha presentado la entidad bancaria con el objetivo inicial de reducir 2.023 puestos de trabajo. Según fuentes sindicales, las condiciones en las que se ha perfilado el proceso de despido colectivo no contemplan las salidas forzosas, es decir, se asegura la voluntariedad de las mismas y en caso de que no surgieran 2.023 voluntarios para dejar la empresa, no se alcanzaría necesariamente dicha cifra.

Desde los sindicatos se afirma que las condiciones pactadas con la empresa son suficientemente buenas, "mejorando en muchos aspectos las de anteriores EREs", para que se llene el cupo, que, de todas formas, implicará el cierre de cerca de 800 oficinas, lo que puede suponer que el efecto del ERE alcance a unos 2.023 empleados. Así lo ha reconocido la entidad financiera que, además, ha valorado el impacto económico del ERE en 890 millones de euros. La mayor parte de las salidas se producirán durante el segundo semestre del 2019.

Los representantes de CCOO ha decidio no firmar el acuerdo alcanzado entre el resto de las partes: "CCOO con un 40,58% de representación ha mantenido desde un primer momento que no aceptaríamos ni extinciones forzosas ni movilidad geográfica forzosa", ha destacado el sindicato. Y aunque no hay salida obligadas, no ocurre lo mismo con respecto a la movilidad, que en caso de no aceptarse implicaría una extinción forzosa.

En cuanto a las condiciones del ERE, los trabajadores que se acojan a las salidas cobrarán un 57% del sueldo regulado hasta los 63 años. El pago se podrá recibir en renta o como pago único. Y se incluye una prima de 3.000 euros susperior a la prima ofrecida en el ERE del 2015. A los nacidos en 1966 y 1967, que tienen 52 o 53 años, se abonará ese mismo porcentaje del salario durante ocho anualidades y se les pagará el convenio especial de la Seguridad Social hasta los 63 años, al tiempo que recibirán una prima de 38.000 euros. Por su parte, los voluntarios incluidos en el colectivo C, es decir, los menores de 52 años que acepten rescindir su relación laboral con CaixaBank, recibirán una indemnización de 45 días por año trabajado con un mínimo de 36 meses y un máximo de 42, así como un prima de entre 13.000 y 23.000.

Incremento de primas

El acuerdo, que ha llegado precedido por un preacuerdo alcanzado pasadas las tres de la madrugada, recoge gran parte de las demandas planteadas por los sindicatos, como un incremento de las primas por extinciones y por movilidad forzosa, según han informado fuentes sindicales. En este último caso se acota los procesos de desplazamiento obligados por la empresa a un ratio de 75 kilómetros, reduciendo la oferta inicial de Caixabank que contemplaba toda la provincia. Se incluyen primas que van desde los 4.500 euros a los 16.200 euros, en función de la distancia y el tiempo.

En materia de horarios de atención al público el preacuerdo los fija en hasta las 18.30 el jueves y hasta las 14.30 el resto de días de entre semana. Para las oficinas con horario singular se fija el 50% por provincia o un mínimo de 200.

Los sindicatos aceptan la supresión de los subdirectores de las oficinas que cuentan con tres empleados. Es decir que los puestos que queden vacantes no se cubrirán. A cambio la empresa se compromete a incrementar la plantilla de las oficinas 'store' con 1.500 plazas y llevar a cabo el proceso de formación correspondiente.

Aunque los sindicatos celebran ya la consecución del acuerdo antes de la firma, este no se ha cerrado hasta a media mñana de este miércoles, ya que quedaban algunos flecos pendientes por aclarar sobre aspectos  de movilidad y garantías adicionales que plantean los sindicatos. También está por aclarar los protocoles de los centros 'inTouch'.

Plan estratégico

El ERE forma parte del plan estratégico de CaixaBank para convertirse en una entidad financiera más digital. El banco llegó al 2018 con una red de 4.461 oficinas que pretende reducir hasta las 3.640, con lo que decidió intensificar el proceso de cierre de sucursales hasta prescindir de 821 en ese periodo, un 18,4% de la red actual, y un 36% de las sucursales urbanas del banco, que es donde se concentrará la reestructuración en ese periodo.

Además de cierre de esas oficinas, la entidad transformará otras sucursales a su modelo 'store', centros más grandes y digitalizados  y más dirigidos al contacto con el cliente que a la realización de transacciones. En estos momentos, tiene 281 de esas oficinas, cifra que elevará hasta las 600. La actual trama de oficinas agrarias (Agrobank) se mantendrá como actualmente: un 11% de la red total, pero incorporarán cambios de estructura.  CaixaBank es la entidad con una mayor penetración de oficinas en el entorno rural, y según el plan estratégico, no modificará esa situación. Pero finalmente, el pacto con los sindicatos incluye la ampliación de 340 oficinas 'store' y 70 oficinas 'business bank' (de emepresas) y un máximo de concentración del 50% por provincia, o un mínimo provincial de 200 oficicnas en horario general.

Por lo que se refiere a las oficinas 'inTouch' --relación 'on line' con el cliente, através de gestores--, se acepta que un total de 2.000 gestores y se crea un protocolo quie regule las incidencias de esa red. Asimismo, para mantener la red rural se aceta el mantenimiento de 300 oficinals con un solo empleado, con un mácimo de 1.300 clientes, y se crea una nueva modalidad de oficina con dos empleados, con un límite de 450.