La Generalitat pospone negociar el retorno de las pagas extras

Los funcionarios catalanes son los únicos de todo el estado español que todavía no han recuperado ni un euro de las pagas extras retiradas el 2013 y el 2014. El martes 18 de septiembre está programado un nuevo encuentro de la Mesa General de Negociació de l'Empleat Públic de l'Administració de la Generalitat de Catalunya, el órgano donde el ejecutivo catalán y los sindicatos negocian las condiciones laborales de los empleados públicos. No obstante, en el orden del día no figura debatir sobre cuándo la Generalitat abonará dichas pagas, según han afirmado las diferentes partes de la negociación

Los puntos a acordar con el 'conseller' de Políticas Digitales y Administración Pública de la Generalitat, Jordi Puigneró, serán un incremento salarial para este 2018 de entre 1,75 y 1,95%, donde el ejecutivo catalán tiene ese 0,2% de margen de negociación, y el pago íntegro de los salarios a los funcionarios desde el primer día de su incapacidad temporal. Ambas cuestiones ya fueron aprobadas meses atrás en la Mesa de la Función Pública a nivel estatal y son de obligado cumplimiento para la Generalitat.

El no presentar un calendario para el retorno de, como mínimo, el 10% de la pagas extras del 2013 y el 2014 fue el motivo por el cual los sindicatos con representación -CCOO, UGT e IAC- se levantaron de la infructífera reunión del pasado 20 de julio.  Entonces el ‘conseller’ adujo que la ley de estabilidad presupuestaria le impedía cumpir con el compromiso ya firmado con los funcionarios catalanes. Un argumento al que los sindicatos no dan veracidad.

La estrategia de la Generalitat ha cambiado y los incrementos y el retorno de las pagas se negociarán por separado.  “Si podemos pactar los puntos del día no será una gran noticia, pero nos permitirá seguir avanzando en las negociaciones”, afirma el coordinador del Área Pública de CCOO en Catalunya, Joan María Sentís. “¿Es esta la manera con la que premia la Generalitat a los funcionarios que aguantaron la institución durante la intervención del 155?”, se pregunta la secretaria general de la federación de empleados de los servicios públicos de UGT, Encarna Fernández.

Diversas fuentes de la negociación han trasladado que a finales de septiembre o principios de octubre habrá una nueva reunión, donde la ‘conselleria’ tratará de encajar una partida de los nuevos presupuestos para dicho menester. “Al margen de sí hay o no presupuestos, la Generalitat tiene la capacidad de oficio de aplicar algo a lo que ya se comprometió. No firmaremos nada que no sea el retorno íntegro de las pagas extras”, apunta la secretaria general de la IAC, Assumpta Barbens.

El pasado 17 de junio del 2017 el anterior Govern de la Generalitat y CCOO y UGT -IAC lo rechazó- pactaron la devolución de, como mínimo, el 10% de la paga extra del 2013 antes de finalizar el 2018. También acordaron el retorno de otro 10% de la del 2014 en durante el 2019 y un calendario detallado de los plazos en los que sería reabonado el resto a los trabajadores públicos catalanes. Para presionar al ejecutivo catalán, los sindicatos con representación en la mesa, más CSIF, han convocado una concentración de delegados frente a la sede del Departament de Treball, donde tendrá lugar la negociación.