'Tramontana Portu', anatomía del cambio que desnudó al Barça y desató el delirio en Montilivi

2-2. 29 segundos de Portu en el campo y gol (m. 64.38)

"Cometimos errores flagrantes, que no son propios del nivel de este equipo y de este club", exclamó en la sala de prensa de Montilivi un "cabreadísimo" Xavi. No citó ningún nombre en concreto, pero se le entendió todo. Con 1-2 en el marcador, el Barça tenía el partido en su mano. Dominaba y creaba ocasiones. Míchel ordena un doble cambio: Portu por Tsygankov y Yan Couto por David López. Con dos piezas modifica la estructura defensiva y la ofensiva. Couto ejerce de lateral y desplaza a Eric García como central junto a Blind. "Con la salida de Yan y de Portu quería primero tener un jugador capaz en la salida del balón de hacerlo con limpieza, como es Yan, que tiene desborde desde zona 1. Con Portu buscábamos la profundidad porque si Iván Martín atraía a Cubarsí le podíamos generar, estando Cancelo muy alto, la espalda", reveló luego Míchel. Pisa el murciano césped de Montilivi en el minuto 64.09. Hay un saque de banda a favor de los azulgranas y entonces Sergi Roberto, presionado por Aleix García, envía, y de manera forzada, con su pierna izquierda, el balón de forma imprudente hacia Araujo. Pero Dovbyk le gana al espacio y el tiempo al uruguayo. Portu corre desde la posición de interior zurdo hasta la de extremo derecho. Nadie le sigue. En ocho segundos, el Girona ha empatado. El ucraniano esquiva a Araujo y asiste al delantero murciano, quien, pillo como es, se ha ido alejando de Pau Cubarsí, que no puede interceptar su disparo. Entró Portu en el minuto 64.09 y marcó en el 64.38. Tan solo 29 segundos. Primer balón que toca, primer gol. Cancelo, que supuestamente debía ser su marcador, no aparece en ningún plano televisivo de la jugada. No está. Ni se le espera. De la pérdida irresponsable de Sergi Roberto ("ha sido un error mío, pido perdón al equipo", confesó luego abatido el capitán del Barça) al derechazo de Portu median ocho segundos. "Estuvimos muy incómodos hasta el minuto 60, pero tuvimos la capacidad de equipo grande para darle la vuelta al partido en 10 minutos a todo un Barcelona", reconoció Míchel. "Ese 2-2 nos conectó. Conectamos con la grada, conectamos con el juego y conectaron entre ellos. Hubo energía y fútbol. Han hecho 20 minutos brutales", añadió el técnico del Girona.

3-2. Portu asiste y Miguel, con la derecha, marca (m. 66.36)

Un balón largo de Eric García –era la única solución que tenía para superar la presión del Barça- es controlado por Portu. Mal control y luego es mal despejado por la pierna izquierda de Pau Cubarsí en el centro del campo, ubicado más como lateral que como central zurdo, su posición que tampoco es la natural. Ahí se desata otra tormenta ‘portuniana’ aprovechando un pase al primer toque de Aleix García, que pilla a Cancelo tan adelantado en el campo que ha descuidado sus obligaciones defensivas. Apenas 11 segundos dura el vertical y venenoso ataque del Girona donde solo intervienen tres jugadores. Aleix pasa, Portu cabalga y Miguel, el lateral zurdo, viene corriendo 50 metros en solitario sin que ningún azulgrana lo detecte. Llega solo el exdefensa del Madrid al área de Ter Stegen. Controla con la izquierda y remata con la derecha, interviniendo decisivamente la bota diestra de Koundé para desviar la trayectoria de la pelota y engañar al meta alemán. Cancelo no llega a tiempo de frenar a Portu. Ni tampoco a Miguel. "Teníamos un dominio absoluto del partido. Si hubiéramos hecho el 1-3 habría cambiado totalmente el partido. Pero no lo haces y encima le regalas los tres goles", se quejó Xavi. Tras el 3-2, el técnico del Barça hace los dos primeros cambios: Raphinha por Fermín y Pedri por Christensen, desmontando así la fórmula de los 4 centrocampistas que tan bien le funcionó en la hora inicial.

4-2. Xavi, tras la volea de Portu: "Hacemos despejes que no orientamos bien" (m. 74.00)

El Barça queda aniquilado en Montilivi. Más en lo mental que en lo futbolístico. Desde la aparición de Portu (m. 64.09) no dispara ni una sola vez a portería. Un zurdazo de Raphinha (m. 73.18) que se fue por encima del larguero de Gazzaniga y un cabezazo estéril de Araujo a la salida de un córner (m. 88.01). Antes de Portu había firmado 14 disparos y siete entre los tres palos provocando hasta cinco paradas del meta del Girona. "Hacemos despejes que no orientamos bien", se lamentó luego Xavi. Tampoco dio nombres. Aunque en el cuarto gol del Girona fue un mal despeje de Pau Cubarsí, en esta ocasión con la cabeza lo que originó el pase tranquilo de Iván Martín para Savinho. Y el brasileño se inventó un balón curvado y en diagonal para que Portu soltara un derechazo ("es el gol perfecto para entrar en la Champions", confesó Míchel) que destrozó al Barça. "Es una cesión atrás en la que regalamos el partido”, se quejó Xavi, desconcertado porque su equipo perdió “el orden” y hasta el alma. Un saque largo de Gazzaniga estuvo en el inicio del 4-2 despejado hacia dentro por Pau Cubarsí. De Iván a Portu apenas transcurrieron siete segundos. Con el segundo tanto de Portu, ordena tres cambios: Oriol Romeu por Sergi Roberto (m. 79), Ferran Torres por Lewandowski (m. 79) y Joao Félix por Lamine Yamal (m. 82). Pero el Barça no cambia nada, zarandeado y abatido como queda por el derechazo del murciano. "Ese gol es de una confianza tremenda. Lo normal era controlar esa pelota", argumentó Xavi. "Y se atreve a hacer una volea desde fuera del área y le sale, pero le dimos nosotros la confianza total porque regalas el 2-2, el 3-2 y el 4-2", sentenció el entrenador azulgrana. "Es el mejor gol de la Liga. Entrar en la Champions con ese gol es un reconocimiento y para decir: ‘Madre mía lo que ha hecho este Girona! ¡Es un gol que se ha imaginado él solo!", confesó Míchel.