Carlos Sainz pide dar media vuelta al helicóptero que le evacuaba a un hospital y sigue en el Dakar

El piloto castellonense de motos Joan Barreda tuvo que abandonar este martes el Rally Dakar 2023 debido a una nueva caída, esta vez muy dura y al inicio de la novena etapa --entre Riad y Haradh sobre 358 kilómetros de especial--, que le obligó a ser trasladado en helicóptero a un centro hospitalario de la capital saudí. En coches, Carlos Sainz volcó su vehículo y mientras era trasladado también al hospital pidió que el aparato diera media vuelta y regresar a la competición con su coche maltrecho.

Barreda, que buscaba el triunfo de etapa para ganar tiempo y posiciones cara a la llegada del desierto puro del 'Empty Quartar' a partir de este miércoles, tuvo un accidente en el kilómetro 16 y, tras darse de bruces, notó un dolor en la espalda y fue trasladado a un hospital.

El de Torreblanca, en su 13º Dakar, se quedó así sin opciones de éxito en el que podría ser su último Rally Dakar. En el arranque de esta especial, era octavo a 7:21 minutos del líder Skyler Howes.

Howes, líder por solo tres segundos

La etapa se la llevó el argentino Luciano Benavides (Husqvarna) --en su segunda victoria parcial en lo que va de prueba, el único en conseguirlo-- con 1:02 minutos de margen sobre el australiano Toby Price (KTM) y 2:57 sobre el estadounidense Skyler Howes (Husqvarna).

Howes sigue líder de la general, pero con solo tres segundos de margen sobre Price, que le pisa los talones. Tercero es el argentino Kevin Benavides (KTM), a 5:09, mientras que Adrien van Beveren (Honda) está ya lejos de la pugna a 15:40 minutos.

El esfuerzo de Sainz

El francés Sébastien Loeb, mientras, sumó su tercera etapa en la novena especial del rally y se benefició de un problema mecánico del sudafricano Henk Lategan (Toyota) y ya está en el podio de la general de un raid al que se aferra Carlos Sainz (Audi) tras haber rozado el abandono este martes con su aparatoso accidente.

El madrileño ejemplificó lo que es el Dakar, un rally de resistencia. Volcó en el kilómetro 5 de la especial, su coche quedó con las ruedas hacia arriba, pudieron darle la vuelta, los dolores torácicos le llevaron a subirse al helicóptero para irse al hospital de Riad, pero el madrileño pidió que diera la vuelta porque quería retomar el raid con su maltrecho RS Q e-tron E2, que necesitó asistencia.

No fue el único contratiempo del día. Lategan, segundo en la general a 1h.03 del líder, el catarí Nasser Al-Attiyah (Toyota) cuando comenzó la jornada, se vio obligado a parar a los 18 kilómetros por un problema mecánico.

En el primer punto de control, el del kilómetro 43, cedía 45:59 respecto a Loeb -el más rápido- y ya perdía a esas alturas la segunda posición del Dakar en beneficio del brasileño Lucas Moraes (Toyota).

Loeb recuperó la primera posición al paso por el 163, donde aventajaba en 1:24 a Zala y en casi tres minutos a Ekstrom, renta que amplió a 1:51 sobre el lituano tras 202 kilómetros de especial.

Ventaja del catarí

Rumbo a su tercer triunfo de etapa, el nueve veces campeón del mundo de rallies afianzó la primera plaza cubiertos 239 kilómetros de especial con 2:38 sobre Zala y casi cinco respecto al de Audi, una renta que siguió creciendo tras 282 kilómetros.

En el último intermedio, Loeb contaba con 3:42 respecto a su inmediato perseguidor. El francés completó la etapa en 3h05:14, 3:07 mejor que Zala y con 11:08 de ventaja respecto a Al-Attiyah. "A este ritmo necesitaríamos seis meses para alcanzar a Nasser. Con todo, ha sido un buen día y me siento feliz por haber terminado la etapa", indicó el ganador.

En la general, el catarí le saca 1h40:58, pero el alsaciano ya es tercero tras superar a Lategan y está a 19:09 de Lucas Moraes, segundo a 1h21:57 del líder.