La ‘salsa’ de las penalizaciones en Spa

Después de tres semanas de parón estival, la Fórmula 1 ha vuelto a la acción en el espléndido (y mejorado) circuito de Spa-Francorchamps, donde empezará a dirimirse la recta decisiva de un campeonato que a falta de nueve grandes premios lidera con solvencia Max Verstappen (Red Bull). El neerlandés afronta el Gran Premio de Bélgica con 80 puntos de ventaja sobre Charles Leclerc (Ferrari), pero no baja la guardia. Y visto lo visto, hace bien. Los sobresaltos han comenzado ya de entrada, puesto que hasta seis pilotos, incluidos los dos máximos aspirantes al título, Verstappen y Leclerc, recibirán penalizaciones por cambiar motor este fin de semana y serán relegados al fondo de la parrilla.

Leclerc, que ya tenía asumido que arrancaría último en Spa al montar la nueva unidad de potencia de Ferrari, que según estimaciones puede darles hasta 15 caballos más de potencia, se ha encontrado con un 'regalo' inesperado al enterarse que también Red Bull había decidido recurrir al cuarto motor en el coche de Verstappen. Y para añadir 'picante', Norris, Ocon, Bottas y Mick Schumacher (este último de momento solo 10 posiciones), se han sumado a la lista de los que penalizarán, con lo que la clasificación de este sábado (DAZN, 16.00h - 17.00h) les ordenará en la zona trasera de la parrilla.

Verstappen, remontada de campeón en Hungría

Sainz, referencia en Ferrari

Esta situación permite que Carlos Sainz aborde el gran premio con máximas expectativas y como principal referencia en Ferrari. El madrileño, que el domingo buscará su segunda victoria en la Fórmula 1 tras la que conquistó en Silverstone, ha empezado como el más rápido en una primera sesión de entrenamientos libres pasada por agua y ha terminado el día en el quinto puesto en Libres 2, sin poder mejorar bajo una intensa lluvia que no se espera que se repita en clasificación, ni en la carrera.

En condiciones de mojado Verstappen ha establecido el mejor crono (1.45.507), por delante de Leclerc, a un mundo (8 décimas) y Lando Norris (McLaren), a más de 1 segundo. Una auténtica exhibición de poder del campeón de Red Bull. Fernando Alonso, que en la tanda matinal se ha quedado muy lejos, ha escalado hasta la séptima plaza con el Alpine en un día difícil para su compañero Ocon, que por la mañana apenas ha podido rodar por un problema en la caja de cambios. La sesión vespertina ha acabado con mucha agua en pista y con los favoritos minimizando riesgos después de varios sustos como los que han protagonizado Hamilton o Mick Schumacher.

En Hungría, antes de las vacaciones, todo apuntaba a un doblete de Ferrari y a una carrera con muchos problemas para Verstappen, que partía décimo tras el fallo de fiabilidad de su Red Bull en la Q3 del sábado. Pero a la hora de la verdad el neerlandés supo leer mejor que nadie la carrera en el Hungaroring y protagonizó una remontada de escándalo hasta la victoria, la octava de la temporada para él. Este domingo, incluso con sanción, si deja atrás en la 'qualy' a los otros cinco pilotos que penalizan, puede arrancar 14º. Y desde allí, nada puede impedir que intente otra gesta.