Octavos de final

Nabil Fekir, la amenaza zurda del Olympique

La estrella francorgelina vuelve a la Champions después de perderese el partido de ida con el Barça por una sanción

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zentauroepp46820673 lyon france 03 02 2019 fekir nabil r of lyon and dani190311190824 / EFE / SEBASTIEN NOGIER

Rafael Tapounet

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Si hay un jugador innegociable en el once del Olympique de Lyon que el miércoles se enfrentará al FC Barcelona en el Camp Nou, en el partido de vuelta de los octavos de final de la Champions, ese es Nabil Fekir. Ausente en el encuentro de ida por sanción, el futbolista francoargelino es la gran referencia del equipo que dirige Bruno Génésio, y no solo por el brazalete de capitán que a sus 25 años luce con autoridad indiscutida. Centrocampista ofensivo que destaca tanto por su buen disparo como por su capacidad de asociación, Fekir canaliza todo el juego de ataque del Olympique y es hoy una pieza altamente codiciada por algunos de los más importantes clubes europeos.

De las virtudes de Fekir puede hablar con conocimiento de causa el azulgrana Malcom, que durante su estancia en el Girondins de Burdeos se enfrentó en varias ocasiones al francoargelino, a quien no duda en señalar como el hombre más importante del conjunto lionés. “Es un enorme jugador –apuntó el brasileño en declaraciones al programa deportivo ‘Téléfoot’-. Cuando yo estaba en Francia lo vi marcar goles increíbles. El partido será más complicado si está él”.

Puede estar seguro de que estará. Fekir fue uno de los cuatro pesos pesados de la plantilla del Olympique (junto con Memphis Depay, Ndombélé y Traoré) a los que Bruno Génésio prefirió dejar en el banquillo en el último compromiso liguero del equipo, frente al Strasbourg, para que llegaran descansados al Camp Nou. Antes de eso, el capitán fue decisivo en la goleada (5-1) que el cuadro lionés infligió al Toulouse, en un partido en el que anotó un gol y dio dos asistencias.

El permiso de conducir

Nacido en Lyon en 1993, el chaval Nabil vio peligrar su sueño de vestir la camiseta del equipo de su ciudad a causa de unos problemas recurrentes en la rodilla derecha, que lo obligaron a dejar el club cuando aún jugaba en categoría infantil y que han lastrado desde entonces su carrera. Cuando el Saint-Étienne, archirrival del Olympique, quiso incorporarlo a su equipo juvenil, el cuadro lionés reaccionó y le ofreció a Fekir 1.000 euros para que se pagara el permiso de conducir a cambio de que volviera. Desde entonces, ya no se ha movido de la ciudad del Ródano.

Debutó con el primer equipo en la temporada 2013-14, pero su gran eclosión llegó en el curso siguiente, con 13 goles en la Ligue 1 que le hicieron acreedor a la distinción de mejor jugador joven del año. El seleccionador Didier Deschamps empezó a incluirlo en sus convocatorias (no sin antes vencer la resistencia del padre del futbolista, que prefería verlo jugar con la camiseta de Argelia) y el 4 de septiembre del 2015 le dio la oportunidad de ser titular en un encuentro amistoso frente a Portugal. Nunca lo hiciera. En el minuto 13, Fekir se rompió el ligamento derecho de la rodilla derecha y, como consecuencia, tuvo que hacer frente a un periodo de inactividad de más de seis meses que le hizo perder el tren de la Eurocopa 2016, disputada, precisamente, en Francia.

Jóvenes talentos

No solo eso. En aquel tiempo, el Olympique era un equipo plagado de jóvenes promesas en el que, junto a Fekir, brillaban jugadores como Samuel Umtiti, Alexandre Lacazette y Corentin Tolisso. Todos ellos fueron abandonando progresivamente el club (para ir al Barça, el Arsenal y el Bayern de Múnich, respectivamente), mientras el francoargelino recuperaba su mejor forma y se convertía en el pilar de ‘les Gones’, capitaneando a una nueva hornada de talentos encabezada por Mendy (23 años), Aouar (20), Terrier (22), Ndombélé (22), Tousart (21), Moussa Dembélé (22) y Traoré (23).

Zurdo cerrado, Fekir no solo tiene gol y regate, sino también una visión de juego fuera de lo común que le permite participar en el inicio de la jugada y brillar a la hora de dar el último pase. Solo las dudas que suscita el estado de su rodilla evitaron que el pasado verano cambiara el Ródano por el Mersey y fichara por el Liverpool, que se echó atrás en el último momento. También el Real Madrid lo pretendía. Su contrato con el Olympique expira en el 2020 y Jean-Michel Aulas, todopoderoso presidente del club lionés, ya prepara una suculenta oferta de renovación para intentar impedir su marcha. No lo va a tener fácil.