entrevista con el CAMPEÓN DE CARRERAS Y ESQUÍ DE MONTAÑA

Kilian Jornet: "Miras atrás y dices: lo he hecho; eso te da energía"

Sencillo 8 Kilian Jornet, en un momento de descanso.

Sencillo 8 Kilian Jornet, en un momento de descanso.

D. T.
SAINT DENIS

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-¿No se cansa nunca de correr?

-Sí, claro que sí. Cuando llego al final siempre estoy muy cansado, pero hay un gran trabajo psicológico. Cuanto más esfuerzo has hecho para conseguir una cosa, la satisfacción al acabar es más grande. Dices: me ha costado mucho, he sufrido mucho, pero he sido capaz de hacerlo. Es muy difícil de explicar. En los 10 o 15 segundos después de cruzar la meta, ves todas las imágenes, recuerdas lo que has sufrido, lo que has vivido, y eso te da una energía enorme.

-¿Dónde está la frontera entre disfrutar y sufrir cuando hablamos de una carrera de 163 kilómetros?

-Durante la carrera sufres más que disfrutas. Hay pequeños momentos en que puedes disfrutar, pero te duelen las piernas, te duele todo, está el desgaste psicológico... Lo único que le digo a la gente es que lo pruebe porque esa sensación final te da mucha fuerza y te hace sentir bien interiormente. Miras atrás y dices: he salido de aquel punto a 200 kilómetros y he llegado hasta aquí. He sido capaz de hacerlo. Y durante una carrera larga hay muchas vivencias, hay momentos muy muy duros, pero también muy buenos. Puedes tener un golpe bajo, te encuentras fatal, e incluso crees que no podrás hacerlo, y resucitas, y luego ves imágenes que nunca olvidarás: el volcán en Reunión, la salida del sol al lado del mar o en el Montblanc, detrás de la cima. Son momentos mágicos...

-Y hay mucho tiempo para pensar.

-En las carreras cortas, de esquí o de montaña, de dos horas, estás concentrado en la técnica, en la estrategia, en el terreno. Pero en las largas sí piensas mucho. En todo: en la agenda, en cosas que tienes que hacer después, y también a veces te pones místico (risas). Te vas montando paranoias... La mente es importante separarla. Lo difícil delultratrail es estar concentrado 20 horas. En los momentos importantes has de centrarte y motivarte para seguir, y en los otros liberar la mente.

-¿Correr o esquiar?

-Me gustan igual las dos cosas, porque lo que me gusta es la montaña. La suerte que he tenido es que mis padres me inculcaron el amor por la montaña. Es muy distinto vivir en la montaña que quererla. Y hay que aprovecharla en todas las condiciones. A nivel articular, el esquí va muy bien porque descarga las rodillas, y en lo psicológico también porque a final de verano estás cansado de correr, ya tienes ganas de nieve y de frío.

-¿No tiene la sensación de que hay un boomde la montaña?

-Sí, sí, enorme. Cada vez vivimos más en la ciudad, hay más trabajo de oficina... Al final acabamos rodeados de cemento. La gente tiene ganas de salir, de estar en la naturaleza, y también ganas de hacer deporte, y esto une las dos cosas. Losultratrailmotivan mucho porque es un objetivo que te fijas a hacer en un tiempo. Y, por ejemplo, estás dos años pensando en eso, saliendo cada día, motivándote, diciendo: ¿seré capaz de acabarlo? Y eso es lo que te da energía para entrenar y también para vivir.