David Pamies (Elche, 1982) trabaja como investigador en Neurotoxicología en la Universidad de Lausana. "Hacemos miniórganos a partir de células madre -explica-. Yo, minicerebros que se utilizan para probar químicos que van a ir al mercado. En vez de usar animales, se usan estos cerebritos, higaditos, riñoncitos".

El científico escribe guiones de cómic. Cansado de que en la órbita de la amistad no prosperaran, decidió contratar a un dibujante. El elegido fue David Sánchez (Madrid, 1977), premiado como Autor Revelación en el Salón Internacional del Cómic de Barcelona de 2010 por 'Tú me has matado' y en la actualidad algo desencantado con el medio. "No creo que vuelva a hacer un cómic en el que solo aparezca mi nombre en la portada -señala-. No me salen las cuentas con las ventas de mis álbumes como autor. Siempre he vivido de la ilustración y ahora si hago un cómic es por encargo".

En este caso, de un particular. Mientras trabajaban (uno en Lausana y el otro en Cercedilla) en una historieta de 10 páginas se enteraron de la existencia del Premi Finestres de Còmic en Català, ampliaron el proyecto a las 24 páginas que exige presentar el concurso y lo ganaron en su edición de 2023. A las librerías llega ahora el resultado final, 'El rei dels cargols' (Editorial Finestres), de 100 páginas.

Artefacto sutil

No es la génesis más romántica de la historia del cómic, pero 'El rei dels cargols' es un artefacto sutil y que funciona de perlas. Los policías Gros y Cheto, con la vida en ruinas el primero y un insensato el segundo, van al cielo, el infierno y el reino de las hadas para intentar resolver un caso. Como si tal cosa. A ellos ya no les sorprende nada porque siempre les tocan investigaciones marcianas.

"Son como Mortadelo y Filemón a la americana, un poco dúo cómico", dice Sánchez. "Los dos están en la mierda, aunque uno es más negativo y el otro más positivo -dice Pamies-. Han tocado fondo y simplemente siguen adelante. Quería transmitir la idea de que a veces nos preocupamos demasiado por cosas que no podemos controlar". Como las maquinaciones de Lucifer, que son la supertrama escondida.

En Amarillo, Texas

A la americana. ¿Por qué Gros y Cheto son agentes de la ley precisamente en Amarillo, Texas? "Buscaba un sitio que la gente supiera que está ahí, pero sobre el cual no conociera muchas cosas -responde Pamies-. Que fuera un poco misterioso. También lo elegí pensando en la segunda entrega". Pamies ya tiene escrita esa segunda entrega y está con la tercera, pero que haya nacido una serie "dependerá de la editorial".

Seguidor estricto de la línea clara, Sánchez considera que "cuanto menos utilices, mejor". No obstante, los dominios de Lucifer son tan tentadores que en ellos se permitió lo que él tiene por recrearse en alguna página. En la dimensión demoniaca siguió "la imagen que todo el mundo tiene del infierno". Igual en la celestial y la de las hadas. "Me veo reflejado en su estilo -indica Pamies-. Tiene un trasfondo oscurillo e irónico".

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