Subida de precios

Casi un 60% de los españoles ha recortado su gasto en hoteles y restaurantes por la inflación

El ahorro de las familias cayó a la mitad en 2022 erosionado por la inflación

El salario más habitual en España apenas subió un 0,1% en 2021, hasta los 1.542 euros

BARCELONA 01/06/2023 Barcelona. Entorno de bares y terrazas cerca del forum donde se realiza el festival Primavera Sound. FOTO de ZOWY VOETEN

BARCELONA 01/06/2023 Barcelona. Entorno de bares y terrazas cerca del forum donde se realiza el festival Primavera Sound. FOTO de ZOWY VOETEN / ZOWY VOETEN

Paula Clemente

Paula Clemente

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La intención de salir y viajar permanece intacta, pero cada vez más hogares españoles lo hacen (y lo harán) poniendo mucha más atención a lo que piden, a lo que gastan, a donde van y donde se alojan. Porque si bien cerca del 80% de las familias pretenden irse de vacaciones en las próximas semanas, hasta un 60% de los hogares aseguran, al mismo tiempo, que se han visto obligados a recortar su gasto en restaurantes y hoteles por la subida de precios y de los tipos de interés. Es, según un estudio de análisis de situación que ha llevado a cabo Cofidis, la categoría que lidera el ránking.

Este informe, elaborado para observar el estado de la economía familiar en España, concluye que prácticamente la mitad de los encuestados (45%) han detectado y, consecuentemete, forzado cambios en su dinámica habitual de gasto. Es decir, el 70% dice estar gastando más en suministros básicos (agua, luz, gas); el 61%, que paga más de hipoteca; y el 58%, que le ha subido la alimentación. Ante esta situación, el 59% de las personas encuestadas han recortado su gasto en hoteles y restaurantes; el 55% en ocio y cultura; el 49% en equipamiento y artículos del hogar; otro 49% en tecnología y, otra vez un 49% en ropa y calzado. No es hasta la sexta posición que aparece el alcohol y el tabaco (47%).

“Lo primero que han hecho los españoles es reducir en gastos que no consideran de primera necesidad, como el turismo o el ocio, las categorías que están más penalizadas”, analiza la directora del negocio de experiencia digital de Cofidis, Anna Golsa. “España es un país de salir y estar muy fuera, eso no ha disminuido, pero si lo ha hecho el consumo”, añade. “Seguramente [el consumidor] gasta menos de lo que le gustaría, la calidad del consumo sea más baja o esté buscando alternativas más baratas”, perfila, por su parte, el director de investigación de mercado de la misma empresa, Enrique Gómez.

En general, el estudio indica que para casi la mitad de los hogares españoles la inflación ha supuesto cambios significativos en su estilo de vida. En concreto, el 33% ha tenido que cambiar algún aspecto importante y el 12% dice directamente que no puede mantener el estilo de vida que llevaba.

Reacción a la incertidumbre

“Está claro que el impacto macroeconómico está afectando a un porcentaje significativo de hogares, igual que el incremento de precios de las hipotecas; también que la Guerra de Ucrania se ve con preocupación, principalmente por como les pueda impactar; y es muy significativo como el alto incremento en costes de aquellas partidas fundamentales (vivienda o alimentación) ha incidido en aspectos de consumo”, redondea Gómez. “Ocurre siempre cuando hay momentos de incertidumbre, que los hogares intentan contener más el gasto por lo que pueda pasar”, explica.

Este amago de crisis también se percibe en otras señales, como por ejemplo que cae la proporción de hogares que prestan ayuda económica a sus propios familiares (del 32% del año anterior al 21% este año) o que no mejora la capacidad de ahorro: una cuarta parte de las familias siguen sin poder ahorrar a final de mes.

De momento, sin embargo, la compañía no ha detectado un repunte de las demandas de crédito, si bien esto está probablemente influido porque Cofidis mantiene por ahora una actidud más “de letargo” que de fomento del crédito. “Sí que hay cierto aumento en [préstamos de] pequeños importes, pero no es un incremento destacable”, conluye Golsa.