Gavà, Castelldefels y El Prat rechazan la propuesta de Aragonès para ampliar la capacidad del aeropuerto de Barcelona

La nueva propuesta para la ampliación del aeropuerto de Barcelona-El Prat del Govern ha pillado por sorpresa a las ciudades más afectadas, que en las últimas horas han manifestado su rechazo total al anuncio del ejecutivo de Pere Aragonès. La alcaldesa de Gavà, Gemma Badia (PSC), ha calificado el anuncio como "decepción" y ha reprochado a Aragonès que haya dado conocer la propuesta de forma unilateral y sin que los consistorios tuvieran claro lo que se planteaba.

Gavà es una de las ciudades más perjudicadas por el ruido de los aviones. Así, el reproche de Badia responde a la intención del ejecutivo catalán de cambiar la actual operativa de las pistas del aeropuerto para, sin ampliarla, ganar en capacidad. También el alcalde de Castelldefels, Manu Reyes (PP), ha criticado el anuncio, que ha tildado de "electoralista": "Me ha sorprendido tener que enterarme por la prensa de una propuesta que afecta directamente a nuestro territorio y para la que no se ha hablado con las ciudades".

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Más concretamente, el Govern propone suspender la operativa segregada actual de las pistas del aeropuerto de El Prat y permitir que ambas paralelas funcionen de forma independiente, de modo que acoja tanto aterrizajes como despegues. Algo que ocurriría cuatro horas al día en los meses de julio y agosto. Para Badia, esta opción, significa "vulnerar las premisas básicas del acuerdo entre Ministerio y Generalitat de Catalunya en función al límite que tenemos Gavà en cuanto a la 'paz acústica' y la reducción del impacto acústico sobre nuestros vecinos y vecinas".

De esta forma, se pasaría de los 78 vuelos por hora a los 90, el máximo de capacidad prevista en la declaración de impacto ambiental del aeropuerto. Sin embargo, la medida afectaría a los vecinos Castelldefels y Gavà, que históricamente han reclamado que se blinde la operativa de pistas segregadas actuales, que hace que una pista se utilice únicamente para salidas y la otra para llegadas. Una segregación de pistas que la alcaldesa de Gavà ha recordado que se logró, tras mucha presión vecinal, en 2006 y que ha definido como "un camino de no retorno".

Alcaldes indignados

Reyes también ha reprochado al ejecutivo catalán que, de llevarse a cabo el cambio a pistas independientes, la vida cotidiana de los vecinos y visitantes de las playas de Castelldefels "sería insoportable" debido a una cantidad de "sobrevuelos desproporcionada".

No solo los alcaldes de Gavà y Castelldefels han expresado sus críticas al la propuesta. También los representantes de Viladecans y El Prat de Llobregat, más próximas al aeropuerto, pero menos afectadas por el ruido por como están configuradas las pistas, han criticado el anuncio de Aragonès. "Es sorprendente, y parece una broma electoralista, que el Govern salga precisamente ahora con esta propuesta, en plena precampaña, cuando han tenido todo el tiempo del mundo", ha dicho el alcalde de El Prat, Lluís Mijoler ('Comuns').

Además, Mijoler ha defendido que esta propuesta está pensada para "atraer más turismo, por eso solo habla de julio y agosto y de las 10 a las 12 de la mañana, no busca atraer actividad económica, ya que los horarios en que viajan las personas que vienen a trabajar suelen ser la primera o última hora del día, y no precisamente en verano".

Por su parte, el alcalde de Viladecans, Carles Ruiz (PSC), ha recordado que "uno de los consensos que había entre instituciones es no alterar la operativa. Ahora no es momento de proponer ocurrencias, sino de que haya un gobierno en Catalunya que dialogue con el territorio y plantee soluciones".

Antes que los ayuntamientos, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ya había dicho en una entrevista en 'Catalunya Ràdio' que esta opción no es viable porque afectaría acústicamente a los vecinos de Gavà y Castelldefels, una queja histórica de los vecinos de estos municipios. También el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, se ha manifestado al respecto y ha aseverado que la propuesta "no es seria".

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El aeropuerto de El Prat tiene dos pistas paralelas, que son las que se usan habitualmente, una larga en el lado montaña (06L/24R) y otra más corta en el lado mar (06R/24L). Hay una tercera, la pista transversal (02/20), operativa en los vuelos nocturnos. Con esta configuración, con esta capacidad operativa, no se puede aumentar el número de vuelos intercontinentales, defienden desde Aena, secundados mayoritariamente por el tejido económico empresarial.

Insonorización

La propuesta de cambio de operativa lanzada por el Govern provocaría que los aviones cambien de trayectoria y, en consecuencia, pasen por encima de los núcleos habitados. La solución que aquí plantea es que Aena destine el presupuesto que habían planteado para alargar la pista, unos 300 millones de euros, en comprar o insonorizar las viviendas afectadas de Gavà Mar o Castelldefels.

El president Aragonès ha reconocido "el impacto" que puede tener sobre la población durante unas horas el cambio de modelo, pero ha remarcado que siempre estarían "por debajo de la normativa" y solo sería durante dos meses al año.

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La alcaldesa de Gavà, Gemma Badia, ha dicho en rueda de prensa que, esta propuesta de aislamiento, así como la posibilidad de comprar viviendas son "una falta de respeto absoluta hacia los vecinos de mi ciudad". A su vez, ha comentado que ha hablado con la Asociación de Vecinos de Gavà Mar, una de las zonas más afectadas por el ruido y que le han transmitido su "preocupación" por el anuncio del Govern. Pese a ello, ha recordado que su gobierno está a favor de que se amplíe el aeropuerto, pero no que esto se haga "a cualquier precio".

En el caso de Castelldefels, el alcalde Reyes también ha manifestado que el president del Govern "no es quien para echar a los vecinos de Castelldefels de sus casas".

Espacios naturales

La propuesta del ejecutivo catalán también reivindica que su modelo permite la conservación de los espacios naturales en las inmediaciones del aeropuerto, una cuestión que sí que ha aplaudido el alcalde de El Prat, Lluís Mijoler: "Celebro, eso sí, que por fin el Govern diga de forma clara y manifiesta que apuesta por la conservación de los espacios naturales y el Parc Agrari".

Aún así, Mijoler ha incidido también en que esta propuesta "polarizará las posturas tanto de los ecologistas [que verían conservados los espacios naturales] como de los vecinos de Gavà y Castelldefels [que estarían más afectados por ruidos]".