Un programa busca abrir el mar, sin barreras, a las personas con diversidad funcional

Jordi Cargol, campeón de España de Vela Adaptada en los dos últimos años, y Aina Gelpí, campeona de Europa y de España en la clase Hansa 303 y recién designada Mejor Navegante del Año por la Federació Catalana de Vela, destacan la sensación de libertad y autonomía que les aporta navegar. Por este motivo, lo recomiendan firmemente a las personas con algún tipo de diversidad funcional. 

Cargol empezó de pequeño a practicar la vela en Palamós. En la categoría de cadete, navegaba en optimist, la embarcación de vela deportiva de iniciación. A los 22 años, le diagnosticaron una neuropatía degenerativa en las piernas, la enfermedad de Charcot-Marie-Tooth. El mundo le cayó encima, y dejó de navegar. “Los médicos no sabían lo que tenía y solo veían que iba a peor”, explica. 

Disfrutar del momento

Pero llegó el día en que Cargol tomó la determinación de no rendirse. Descubrió la vela Radio Control, que permite manejar la embarcación manteniéndose sentado. Se unió a la Federació Catalana de Vela, que le propuso formar parte del equipo para la Copa Catalana de Vela Adaptada. “La vela me salvó. Tengo la ilusión de seguir haciendo lo que más me gusta”, afirma Cargol con una sonrisa. Aún más cuando la vela le permite “dejar la silla de ruedas y ser autónomo”, ya que el mar no tiene barreras. “El deporte me hace dejar de pensar y disfrutar del momento”, señala, al tiempo que valora la iniciativa de la federación catalana para convertir la vela en una práctica inclusiva.

Navegar formaba parte de la vida de Aina Gelpí desde los tres años, cuando acompañaba a su familia. Hace diez años, a los 27, le diagnosticaron esclerosis múltiple, y lejos de dejar el mar, descubrió nuevas posibilidades gracias a las embarcaciones adaptadas. El modelo Hansa 303 permite navegar de forma individual, con dos velas fáciles de controlar, una orza que impide el vuelco de la embarcación y un joystick que permite el manejo fácil. “Va muy rápida”, destaca Gelpí, regatista del GEN Roses, a la que nada le detiene: no solo ha cruzado navegando en compañía el Atlántico, sino que ahora tiene entre manos la aventura de atravesar el Pacífico. 

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Ampliar la base

“La gente tiene que saber que pese a las dificultades, puede navegar”, indica Gelpí, que participa con Cargol en el programa ‘Mar inclusiu’ que impulsan la federación, la Fundació Barcelona Capital Nàutica y Mi Fundación Álex para dar a conocer este deporte. 

“Hacer accesible la vela permite contar con más navegantes y más competiciones”, destaca el presidente de la federación, Xavier Torres. 

"No es suficiente tener el mejor barco. Hay que seguir las sensaciones"

Nueva escuela inclusiva

El programa se propone garantizar que los deportistas puedan practicar la vela con accesibilidad y autonomía. Para ello, sus promotores explican que prevén captar nuevos usuarios mediante nuevos cursos y actividades dirigidas a personas con cualquier nivel de diversidad funcional; formar a personal técnico en este ámbito y ofrecer un mayor apoyo a los usuarios. “Hay que facilitar el acceso a las embarcaciones de las personas con menor movilidad”, destaca Gelpí, que también remarca la necesidad de “contar con más recursos para poder ir a las competiciones”. 

El programa contempla la creación de la nueva Escuela de Vela Inclusiva, con 20 alumnos, en el Barcelona International Sailing Center (BISC), y “la celebración del Campeonato de España de Vela Adaptada en L’Escala, del 15 al 20 de julio, con la participación de 60 regatistas”, anuncia el responsable del programa de vela inclusiva de la Fundación Álex, Alberto Puig.  Las actuaciones se llevarán a cabo a través de los clubs catalanes, para que puedan ofrecer la vela inclusiva entre su oferta de actividades.