En Marina Port Vell

Así es el lujoso megayate atracado en Barcelona que movilizó a los ecologistas

Activistas rocían con pintura roja un megayate en Barcelona

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El yate Kaos, en la Marina Port Vell esta semana.

El yate Kaos, en la Marina Port Vell esta semana. / M.L.

Patricia Castán

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El super yate Kaos sigue causando expectación en la Marina Port Vell de Barcelona, donde atracó a finales de agosto y sin que haya trascendido su fecha de despedida final. Entonces llegó procedente de Málaga y sacó partido del amarre XXL de 160 metros que ha demostrado dar rendimiento en este puerto deportivo. La lujosa nave es propiedad de Nancy Walton, hija del empresario que fundó la cadena de supermercados Walmart en EEUU. Tanto sus ocupantes (tiene capacidad para una treintena), como su tripulación de 45 personas, se han dejado ver por restaurantes de la zona y del resto de la capital catalana, tras el incidente que protagonizó la nave a primeros de septiembre cuando fue objeto de una protesta ecologista.

La heredera pagó por el yate costó unos 280 millones de euros en 2019 a la familia real qatarí. Allá donde atraca da que hablar, dado que mide 110 metros de eslora y además ocupa el número 39º en el ránking de los yates a motor más grandes del mundo. Se calcula que solo su mantenimiento supone un gasto de hasta 28 millones de euros anuales.

Además, dispone de 16 camarotes, incluida una gran suite presidencial. Alberga un gimnasio, spa, piscina, un gran acuario, un pequeño hospital y hasta un helipuerto en la proa por si sus ocupantes necesitan desplazarse con rapidez en cualquier momento. Es solamente de uso privado y no se permite su alquiler.

La publicación Forbes sitúa a Nancy Walton como la 229ª persona más rica del mundo, con un patrimonio que ascendería a 8.430 millones de euros. Son fruto de las acciones de Walmart que junto con su hermana Ann heredó de su multimillonario progenitor.  

Largas vacaciones

El buque lleva todo el verano recorriendo el Mediterráneo, y recalando sin prisa en los puertos de Baleares y la costa española, aunque no todo han sido alegrías y fiestas para sus ocupantes. El pasado julio ya se llevaron un buen susto cuando activistas del grupo ecologista Futuro Vegetal rociaron con pintura la nave y le causaron algunos daños cuando se encontraba atracada en el puerto de Eivissa. El colectivo desplegó una pancarta con la frase "Tú consumes, otros sufren".

En Barcelona recaló a finales de agosto en el amarre que opera el magnate ruso Alisher Usmánov en la Marina Port Vell. Y a principios de septiembre sufrió un nuevo golpe por parte de los ecologistas. En este caso, Activistas de Rebelión Científica y Rebelión o Extinción rociaron con pintura roja biodegradable la embarcación. Criticaban que barcos de esas características sean uno de los ejemplos "más evidentes de un estilo de vida insostenible para el planeta". La marina ya había reforzado la seguridad en la zona con motivo de su presencia, por lo que pudo "resolver el incidente con la máxima rapidez, y evitar daños en la embarcación".

Sus ocupantes han visitado la ciudad en varias ocasiones y reservado en los restaurantes de la zona. Su tripulación realizó una salida conjunta a uno de los restaurantes de moda de Marina Vela hace unas semanas.