Collboni no revocará la reforma de la Ronda de Sant Antoni pese a prometerlo en campaña

Jaume Collboni ha firmado su primera gran rectificación como alcalde cuando lleva 26 días en el cargo. El PSC se opuso en el mandato anterior de forma intensa y reiterada a los planes de la reforma de la Ronda de Sant Antoni del gobierno que compartía con Barcelona en Comú. Como socio minoritario de los de Ada Colau, los de Collboni no tuvieron más remedio que conformarse con protestar y contemplar cómo los 'Comuns' sacaban el plan adelante en solitario.

Ahora, los socialistas aceptan el plan, es decir, renuncian a modificarlo, según ha informado la primera teniente de alcalde, Laia Bonet, que ha asegurado que el gobierno no paralizará el proceso de licitación de las obras “por responsabilidad”. Collboni se comprometió durante la campaña electoral, de forma muy explícita, a revocar la reforma dentro de sus primeros 100 días al frente de la ciudad. Quizá este cambio radical deba ser entendido en términos de una posible alianza futura, es decir, de la hipotética entrada de los Comuns en el gobierno del PSC en breve, pero eso algo que solo el tiempo demostrará.

Primeras alarmas por el futuro de la pacificación de la Ronda de Sant Antoni

El anuncio ha causado revuelo entre los residentes del eje, la Plataforma d'Afectats per la Llosa de Sant Antoni, que compartían los criterios de los socialistas para rediseñar la ronda, y rechazaban la "pacificación" excesiva de la zona que firmaban los Comuns, en tanto que los "aisla" de servicios.

Por lo pronto, la concejala de Barcelona en Comú Janet Sanz ha celebrado la decisión: "Se pone de manifiesto la necesidad de que la Ronda de Sant Antoni cuente con un proyecto, y un proyecto bueno. Es una buena noticia". Curiosamente Laia Bonet ha anunciado el cambio de posición de los socialistas de improviso en una rueda de prensa sobre radares de tránsito, aprovechando una pregunta de propina de la prensa asistente.

Por contra, el concejal y portavoz de Trias per BCN, Jordi Martí Galbis, ha criticado rápidamente el "eñgaño a la ciudadanía" por parte del alcalde Collboni, al borrar de un plumazo sus promesas.

Reproches vecinales

Un portavoz de la plataforma de residentes ha relatado a este diario el "malestar" del grupo. "Los socialistas nos han tomado el pelo durante más de dos años". Aseguran que el PSC les espoleó para defender públicamente su propio proyecto para la ronda, y les prometió en campaña y al llegar a la alcaldía que revertiría el de Colau. Con su palabra, el colectivo vecinal --que vive a pie de ronda-- ha aguantado estas semanas "con paciencia" y sin hacer ruido que llegase el anuncio de la teórica marcha atrás. Esta debía producirse "antes del 14 de julio (mañana) a mediodía", cuando estaba prevista la apertura de sobres en el marco del proceso de licitación de las obras.

El giro inesperado ha caído como un jarro de agua fría en la plataforma, que desde hace meses (cuando se retiró la losa) sigue recogiendo fotos y denuncias por los ruidos y problemas que aseguran sufrir al anochecer, cuando el espacio se convierte en zona de diversión y barullo para algunos usuarios nocturnos.

"Estamos defraudados con los políticos que no cumplen sus palabras, con los concejales socialistas con quienes nos hemos reunido tantas veces, y con tantos engaños... Lo único que ha interesado a Collboni es ser alcalde a toda costa", arremete el mismo portavoz, en nombre del grupo. En estos momentos están decidiendo si inician movilizaciones como respuesta.

Por contra, la plataforma en favor de la pacificación total, y que apoyaba el plan de los Comuns durante la pugna, reivindicó hace unos días que el proyecto siguiera adelante. Lo integran entidades del entorno, usuarios, aunque no de residentes de primera fila.

Los antecedentes

En marzo pasado, el gobierno municipal anunció que encaraba la reforma de la ronda Sant Antoni sin el PSC. Los Comuns se han mantuvieron en su propuesta de pacificación entre las calles de Floridablanca y de Villarroel, presentada en febrero. La comisión de gobierno aprobó el proyecto ejecutivo con el voto en contra de los ediles socialistas.

Entonces se precisó que las obras se adjudicarían este mes de julio, que las obras empezarían este verano, con una inversión prevista de 11,3 millones, y que concluirían durante la primavera de 2024.

El plan

El plan aprobado implica incrementar hasta los 16.300 metros cuadrados el espacio público para peatones y zonas verdes integrados entre la ronda y la calle de Tamarit (mil más que los actuales), la creación de una gran ámbito pacificado entre Floridablanca y Villarroel junto con la plaza del pes de la Palla, la de dos placitas en los cruces con Casanovas y con Tamarit, y la pacificación de esta última para conectar la futura ronda con la 'superilla' de Sant Antoni.

También incorpora el carril bus de bajada entre Villarroel y Comte de Urgell para evitar el rodeo que ahora da en contra dirección desde Tamarit por Urgell al dirigirse a Manso.

Lo que dijo el PSC

Cuando la reforma vio la luz verde, la propia Bonet afirmó que el PSC seguía defendiendo el planteamiento inicial de 2018, con buses en ambos sentidos para recuperar su fluidez en la zona, dicen. Y más plazas de carga y descarga, también en el lado de Ciutat Vella. 

Vecinos de la zona han recibido la noticia del cambio de posición de los socialistas con estupor, ya que daban por hecho que no comprarían el proyecto que han rechazado con tanta intensidad tanto tiempo. Pero también otros llevan días reclamando a Collboni que no modificara la reforma prevista.