El Govern licita al fin la redacción del proyecto para prolongar la L1 de metro hasta Badalona antes de 2030

Cuando un proyecto ferroviario da un paso adelante, sobrevuela en el ambiente una cierta sensación de 'déjà vu'. Por eso vale la pena, además de explicar, analizar, calibrar y celebrar la noticia, darse una vuelta por la hemeroteca. El Govern acaba de licitar la redacción del proyecto constructivo de la prolongación de la línea 1 de metro, desde Fondo, en Santa Coloma, hasta Lloreda-Sant Crist, en Badalona, con una estación intermedia en Montigalà y unas cocheras con talleres para que TMB pueda tener otra central de puesta a punto de los trenes. Este julio de 2023. Se cumplen, sin embargo, 16 años desde que la misma Generalitat licitara el estudio informativo de este mismo proyecto. Era el 26 de abril de 2007, con películas como 'Apocalypto' o 'Noche en el museo' en los mejores cines y con Miguel Bosé estrenando el tema 'Morena mía'.

Se cumple a rajatabla lo de la década perdida por la crisis en materia de infraestructuras. Podría decirse lo mismo del tramo central de la línea 9, de las mejoras en la red de Rodalies, de los accesos ferroviarios al puerto de Barcelona, de la Sagrera, de la nueva estación de Sants o del tranvía por la Diagonal. Todo se paró, y es justo admitir que ahora todo va recuperando la forma. En el caso de la prolongación de la L1 más allá de Santa Coloma, el valor estimado del contrato para redactar el proyecto constructivo es de 2,8 millones de euros, IVA incluído. No se confundan con el estudio informativo, pues ahí se da una pincelada más o menos gruesa, mientras que aquí se entra al detalle de cada centímetro cuadrado de la obra, tanto de las galerías como de las estaciones y sus accesos.

Hay que añadir, además, un estudio básico, que fue licitado en 2020 por un millón de euros y que también servirá de base para el redactado definitivo de la obra. Según detalla un portavoz de Territori, este informe ya terminado volverá a ponerse a exposición pública en las próximas semanas, puesto que TMB ha solicitado ampliar las cocheras. De este modo, el documento estará ya 100% cerrado en el momento en el que el nuevo concurso público de redacción del proyecto constructivo tenga adjudicatario.

Promesas pretéritas

Esta última licitación da un periodo de 12 meses para ejecutar el contrato, y luego vendrá una nueva convocatoria pública para que otro privado se haga con las obras físicas de la prolongación del metro. Lo optimista sería pensar que las máquinas empezarán a levantar polvo en Santa Coloma en algún momento del último trimestre de 2025, pero para curarse en salud, lo más prudente es hablar, como mínimo, de 2026. Añadan un par o tres de años de obras, como mínimo. Tengan en cuenta, por aquello de calibrar el optimismo, que se hicieron promesas en 2012 y en 2017 y ninguna de ellas se ha cumplido.

En defensa del actual Govern, por ahora nadie aporta fechas oficiales. Si se han perdido, aquí va un resumen de la cronología: estudio informativo (2007), estudio básico (2020), redacción del proyecto constructivo (2023), concurso para adjudicar las obras (¿2024?), inauguración de la nueva pata de la L1 hasta Badalona (¿antes de 2030?).

El nuevo tramo de metro, de 1,75 kilómetros, dará servicio a los barrios de Montigalà, Lloreda y Sant Crist. La L1 llegará a Badalona por la avenida de Mónaco y la calle de Mendelssohn hasta la nueva estación de Montigalà, que tendrá andenes laterales, una longitud de 100 metros y dos accesos desde la calle (incluído un ascensor). Estará situada junto al polideportivo municipal, bajo el parque de las Montanyetes. El trazado seguirá por la rambla de Sant Joan y hasta la escuela de Joan Llongueras y el instituto-escuela Llibertat, ya en la avenida de Puigfred, no muy lejos del estadio municipal de Badalona. Esta terminal tendrá un andén central de ocho metros y dos vestíbulos con sendas salidas a la calle. En cuanto a la cochera, el plan inicial era que tuviera una capacidad máxima de 14 convois, pero es algo que se revisará al alza a partir de septiembre a petición de TMB, la empresa pública que explota el metro.

Connexión con Rodalies y L2, en el horizonte

El presupuesto de la obra era en 2011 de 260,1 millones de euros, pero en 2020 ya se hablaba de 310 millones. En el año uno de la pandemia, el 21 de mayo, para ser exactos, el Departament de Territori ampliaba las expectativas para la prolongación de la L1: desde Lloreda-Sant Crist hasta la estación de la R1 de Rodalies de Badalona, creando tres nuevas estaciones y un importante intercambiador con la línea costera que opera Renfe.

Se culminaría así el proyecto que se arrastra desde el Pla Director d'infraestructures (PDU) 2001-2010. En otra comparativa sangrante, todo el tramo ampliado desde Fondo hasta la parada de trenes de cercanías tenía en 2002 un precio de 111 millones de euros. En 2009 ya eran 402 millones.

Esta nueva prolongación también permitiría conectar con la L2 de metro a través del bajador de Badalona Pompeu Fabra. Esta fase está en un momento muy incipiente, ya que entonces se encargaron los estudios de impacto ambiental, previos a toda la cronología que ya ha superado el tramo que salta de Santa Coloma a Badalona. Con las cinco estaciones nuevas desde Fondo hasta el mar, se espera captar cerca de 40.000 nuevos viajes diarios. Cuándo sucederá esto, nadie lo sabe. Pero si les gusta jugar, ¿qué se terminará antes, la Sagrada Família o el trazado completo de la línea 1 del metro?

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