Conflicto mercantil

La jueza ordena al nuevo operador del bar Pinotxo de la Boqueria dejar de usar ese nombre comercial

La parte de la familia copropietaria que no participó en la venta de las paradas del mercado logra la medida cautelar y anuncia que continuará con el negocio en otra ubicación

Patricia Castán

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La reapertura del famoso bar Pinotxo de la Boqueria hace 20 días ya hizo presagiar que lejos de recuperar la actividad normal con su nuevo operador, se avecinaban tormentas judiciales por la forma en que se llevó a cabo el traspaso del histórico negocio. Pero la parte de la familia que fue excluida de la decisión ha logrado que el juzgado de lo Mercantil número 9 de Barcelona ordene una medida cautelar por la que requiere a Restaurante Egipto SLU --nuevo operador-- que "cese inmediatamente en el uso de la denominación Pinotxo Bar". En un comunicado realizado a través de sus abogados, también se asegura que esta parte de la familia copropietaria mantendrá el negocio "conservando su espíritu familiar" aunque "desgraciadamente no podrá hacerlo en las paradas que el señor Juanito (Bayén) ha cedido a un tercero".

Cabe recordar que el célebre Juanito se retiró recientemente por problemas de salud a los 89 años tras toda una vida tras la barra de su bar. En un primer momento, pareció que su sobrino Jordi, junto con la mujer e hijo de este iban a continuar con la trayectoria del Pinotxo, ya que eran copropietarios desde 2001, cuando formaron una sociedad civil para oficializar lo que ya era una realidad muchos años atrás. En ella también figuraba un hermano de Asín que falleció, dejando de ese modo la sociedad a medias entre tío y sobrino.

Pero repentinamente, el local fue traspasado (se tratada de una concesión administrativa al estar en un mercado municipal) en febrero a otro empresario de la Boqueria que es titular también del Bar Central y de diversos negocios en La Rambla. Durante unos días y aprovechando las obras de cambio de pavimento del mercado el negocio estuvo cerrado, y posteriormente ya reabrió con nuevo equipo, similar cocina y ante el desconcierto de muchos clientes.

Final amargo

Jordi Asín, en estado de 'shock' y en pleno conflicto familiar con su tío, pidió unos días para la reflexión y rehusó hacer declaraciones contundentes hasta decidir sus próximos pasos. Ahora, con la resolución judicial en la mano, han hecho público su disgusto y el complicado escenario que deja esta escisión familiar. "La juez ordena a Restaurante Egipto SLU que cese el uso de la denominación Pinotxo Bar", subrayan.

Imagen del bar Pinotxo el pasado 1 de marzo, con el nuevo equipo contratado por el actual operador de las paradas.

Imagen del bar Pinotxo el pasado 1 de marzo, con el nuevo equipo contratado por el actual operador de las paradas. / ELISENDA PONS

Como informó este diario, los seis puestos de venta que configuran el bar figuraban a nombre de Juan Bayén desde hacía años. Este había heredado tres de su madre, la fundadora, mientras que la hermana de Bayén (y madre de Jordi) tenía otras dos que también le cedió al mismo, junto a una más que adquirieron. Al parecer solo podía figurar un titular físico o sociedad. Por ello, ahora pudo ejercer el traspaso unilateralmente y con luz verde del Instituto Municipal de Mercados de Barcelona. Sin embargo la sociedad civil tenía cedida tanto la marca como los derechos de las concesiones, según afirma el bufete de abogados Sol Muntañola.

No obstante, afirman que "el negocio seguirá con la tercera y cuarta generación al frente" y con su "buen hacer gastronómico" en otro enclave. Agregan que "la familia es consciente de que esta situación va a ser de difícil reparación". Y aluden a "daños personales, y de imagen" por la "pérdida de la ubicación" en la Boqueria, así como "perjuicios económicos enormes". Pero "se buscará la restitución de sus derechos y la reparación del daño, empleando para ello cuantas acciones en derecho le asistan".

Jordi Asín Bayén, como nieto de la fundadora de un negocio que suma 80 años de trayectoria en distintas ubicaciones del mercado, ve "injustificable" y difícil de comprender lo sucedido, se afirma en la nota. Pero no quieren "afear" la conducta de su tío --al que siempre se recordará por su vestuario de camarero clásico, al frente de la cafetera, y sus dotes de relaciones públicas--. De forma abierta, aseveran que Juan Bayén ha sido "teledirigido" y será el tiempo el que arroje luz sobre "a quien beneficia en última instancia esa decisión e ímprobo proceder".

En el mercado es del dominio público que las relaciones no fueron fáciles entre la primera matriarca y algunas parejas de su prole. Juanito convive ahora con su mujer, a su cuidado.