Un "pulmón" del barrio

La lucha por la supervivencia de una histórica asociación de Ciutat Vella

Amenazada de desahucio, la asociación Recursos d'Animació Intercultural trabaja para evitar su desaparición en un contexto de inflación

Por el momento, en menos de un mes han logrado rebajar su deuda unos 30.000 euros a partir de aportaciones de vecinos y subvenciones

Talleres circenses en el RAI

Talleres circenses en el RAI / Archivo de RAI

Xavier Sánchez

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Desde hace meses, la asociación asamblearia Recursos d'Animació Intercultural (RAI) vive con el agua al cuello. Amenazada de desahucio, la asociación trabaja con ahínco para evitar su desaparición en un contexto complejo de inflación, gentrificación y turismo masivo en el barrio. Ellos se definen como "un pulmón en un barrio donde cada vez conocemos menos al que vive al lado", pero este pulmón se desinfla poco a poco sin el aire de los vecinos.

La situación del RAI es alarmante. Con una deuda de más de 80.000 euros y sin un equipo de trabajadores asalariados, la asociación ha formado un equipo motor de voluntarios para su rescate. "Ahora mismo contemplamos dos planes: el plan A es cerrar RAI; el plan B, rescatar y subsanar el equipamiento y diseñar un nuevo modelo de gestión más sostenible", explica Kyriaki Cristoforidi, portavoz de este equipo motor para el rescate de RAI.

Cristoforidi cuenta que el nuevo modelo de gestión que plantean implantar en la asociación todavía se tiene que diseñar en una asamblea extraordinaria, pero confía en que el RAI pueda generar su propia economía mediante las actividades que acoge o las subvenciones que recibe. Gracias a estas subvenciones y a los socios que van recaudando gracias a las actividades que promueve, la deuda ha bajado hasta los 50.000 euros. Pero no es suficiente.

"El RAI necesita un retorno institucional. Ahora hemos empezado una serie de reuniones con Torre Jussana, Barcelona Activa y el departamento de subvenciones del ICUB", anuncia Cristoforidi. La portavoz también explica que están mejorando a nivel de barrio: "Estamos hablando con asociaciones de barrio para poner en común nuestras necesidades y poder crear conjuntamente una demanda hacia el ayuntamiento".

Luces y sombras de su supervivencia

Pese a que, como explican ellos, su plan A es el cierre del RAI, el grupo motor de voluntarios no se rinde en el afán de sacar a flote a la asociación. Desde que se hizo pública su amenaza de desahucio, afirman que han avanzado mucho en gestión y organización y que hay una clara mejora en cuanto al apoyo vecinal: "Si hay un concierto, se pueden generar 100 socios nuevos pagando una cuota menor. Una actividad menor puede generar unos 40 socios. Siempre hay movimiento", explican desde la asociación.

Estas mejoras vienen acompañadas de "fructíferas" reuniones con la inmobiliaria de la finca. Según explican, "lo ideal para la asociación sería una condonación", pero trabajan para conseguir una rebaja en la deuda y en el alquiler.

Pero esta mejora y reducción de la deuda no es suficiente oxígeno para la asociación, que no se ve con coraje de afirmar su salvación: "Necesitamos el doble o el triple de voluntarios para poder afirmar que seguimos", afirma la portavoz Cristoforidi.

Una decena de voluntarios conforman el equipo de rescate del RAI. Todos ellos combinan las necesidades del RAI con sus empleos, hecho que dificulta la prosperidad del proyecto por falta de tiempo.