El gobierno de Colau quiere bajar la música de las fiestas de Can Vies

El Ayuntamiento de Barcelona quiere bajar la música de los actos que se organizan en Can Vies, el edificio okupado de Sants que fue el epicentro de disturbios por el intento de desalojo y de derribo en 2014. El bipartito de ‘comuns’ y PSC se ha abstenido a una propuesta que Ciudadanos ha presentado en la comisión de presidencia del consistorio y que insta al ejecutivo que impida celebraciones de fiestas y actos multitudinarios en espacios okupados. La reclamación ha prosperado. Frente al apremio de los liberales, el gobierno local ha explicado que trata de mitigar las molestias que el vecindario ha manifestado.

“Se trabaja para regular la intensidad de la música y la periodicidad de estas actividades”, ha comentado el concejal de Sants-Montjuïc, Marc Serra (Barcelona en Comú). El edil ha explicado que vecinos de Sants se han quejado al distrito por el ruido en Can Vies. Serra ha señalado que se produce más bien en horario diurno. “Eso no significa que la actividad no sea molesta”, ha advertido Serra, que ha añadido que las celebraciones nocturnas en Can Vies son “puntuales y esporádicas, enmarcadas en las fiestas de Sants”. 

Serra ha recordado que Can Vies lleva más de 20 años okupado. “No ha pasado con este gobierno”, ha recalcado el concejal. El teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle, ha remachado censurando el papel del ejecutivo del exalcalde Xavier Trias durante los disturbios de hace ocho años. “Estamos donde estamos por la acción pusilánime del gobierno del momento”, ha culpado Batlle, que ha abogado por tratar el malestar en el entorno de Can Vies con “serenidad” para “evitar que unos problemas de convivencia se conviertan en un asunto grave de orden público”. 

La proposición de Cs pedía, además, que el ayuntamiento pasara a gestionar el espacio de Can Vies. Barcelona en Comú ha aducido que no es posible porque el planeamiento prevé que se derruya para convertirlo en un tramo de vía pública. Valents pidió la demolición del edificio okupado en el pleno municipal de septiembre. La propuesta fue desestimada.