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La ‘instagramer’ que te transforma en Playmobil

Su casa haría salivar a los de ‘CSI’: cajones y cajones llenos de brazos y cabezas. En redes es @YouAreClick: personaliza clicks de Playmobil. Le ha dado ‘megusta’ a sus miniclones desde Shakira hasta Torrente

Conoce a @YouAreClick, la cuenta de instagram dedicada a personalizar Playmobils

Conoce a @YouAreClick, la cuenta de instagram dedicada a personalizar Playmobils. /

Ana Sánchez

Ana Sánchez

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Se te queda la misma cara de perplejidad que al ver el nuevo programa de Toni Cantó. En este ático de Santa Perpètua de Mogoda (a media hora de Barcelona) se ven más famosos por metro cuadrado que en cualquier alfombra roja. Ahí está Shakira, con pinta de estar echando pestes de Piqué. Un paso y te topas con Rigoberta Bandini, Ibai Llanos, toda la troupe de ‘La casa de papel, ¿ese es Ed Sheeran? Solo falta Elon Musk entrando por la puerta con un lavabo. Cristina te mira, remira, abre y cierra cajones, mueve las manos a velocidad de mago. Pone en la mesa unos vaqueros gastados igual que los que llevas, el mismo jersey, mangas arremangadas, tu corte de pelo, gafas de pasta, un boli para tomar notas, ¿quieres un móvil? Clik, clik, click. Te hace un miniclon de Playmobil en menos de lo que cambian de primer ministro en el Reino Unido.  

Cris Àlvarez es técnica en educación infantil, 37 años. En sus ratos libres, desmembra cuerpos en su despacho con más agilidad que Dexter. Su casa haría salivar a los de ‘CSI’: cajones y cajones llenos de brazos, cabezas y cuerpos. Tiene más accesorios de los que podría asumir Tamara Falcó. Puñados de tablets, cámaras, caballos, un arsenal de armas que ya quisiera Putin. En redes es @YouAreClick. “Aficionada a transformar los Playmobil en personajes famosos, amigos o en ti mismo –resume su biografía en Instagram-. Acepto retos”. De momento, ya ha pasado a formato click hasta el moño XXL de Amy Winehouse y las trenzas de Pippi Calzaslargas. “Para mí –confiesa- es como una terapia”.

Cuadros de @YouAreClick con La Veneno, Rigoberta Bandini y los protagonistas de 'La casa de papel', en versión Playmobil.

Cuadros de @YouAreClick con La Veneno, Rigoberta Bandini y los protagonistas de 'La casa de papel' en versión Playmobil. / ALVARO MONGE

Aún conserva los clicks con los que jugaba con 5 años. La mansión victoriana, la isla del tesoro, el barco pirata. “Esos son sagrados –se ríe-. Esos no se tocan”. Jugó como cualquier otro niño de los 80, como mucho cambiaba el pelo puntiagudo, y los aparcó en alguna caja en casa de sus padres. Hasta hace 8 años, que empezó a trabajar en una tienda de juguetes. Un día encontró un muñeco con unas patillas enormes como las de su jefe. “Mira –le dijo-, puedes ser tú”. Le puso una camiseta azul, la que llevaba él siempre, le pegó el logo de la tienda, y se hizo su primer miniyo con una camisa a cuadros que solía ponerse. “¡Sois vosotros dos!”, le empezaron a decir los clientes. “Y ahí ya me vine arriba”, sonríe Cris. 

Cris Àlvarez, entre cajones y cajones llenos de piezas de Playmobil.

Cris Àlvarez, entre cajones y cajones llenos de piezas de Playmobil. / ALVARO MONGE

A estas alturas, le han dado ‘megusta’ a sus miniclones desde Shakira hasta Torrente o la Hillary Banks de 'El príncipe de Bel Air. Los han compartido en sus ‘stories’ Candela Peña, el encantador de perros César Millán, las actrices de Vis a vis. Cris personaliza clicks por devoción y por encargo. Los cuelga en redes y los exhibe cuando puede en formato exposición: clicks de música (de las Spice a los Beatles), de series (de ‘Stranger things a ‘Friends’), en marzo hará una de cine. También utiliza los muñecos como reivindicación, apunta: “Temas sociales, LGTBI, el día del autismo… Para que la gente tome conciencia”.  

Ya ha perdido la cuenta de cuántos clicks ha tuneado. “Es un reto –asegura-. A mí me encanta autosuperarme”. Ahí tiene a Marilyn con sus piernas de click al aire y su vestido blanco al vuelo, a Freddy Krueger con la cara de plástico requemada, a Alexia Putellas con su último balón de oro, a Fito&Fitipaldis con boina y patillas. ‘Tu cara me suena’ en versión Playmobil. “Ya incluso voy por la calle y veo a alguien y… Ostras, esta persona la podría hacer fácilmente”. 

Suele llevar siempre encima a su miniyo. “A veces intento ir igual vestida”, se ríe. Tienen camisetas duplicadas. “De algún grupo de música no muy conocido –detalla-. Así les hago publi”. Se ha llegado a ir a Nerja solo para poder hacerle una foto a sus clicks de ‘Verano azul’ delante del barco de Chanquete. También consiguió darles sus miniclones a Juanjo Artero (Javi) y Miguel Joven (Tito). “Tito trabaja como guía turístico de las cuevas de Nerja –detalla Cris-, y Javi estaba ese día rodando un spot”. Es lo que más ilusión le hace, asegura: conocer a los artistas que miniaturiza. 

Encuentra lo-que-sea en segundos entre cientos de cabezas, brazos, pantalones, accesorios. Está todo ordenado como si acabara de pasar Marie Kondo. Cris intenta utilizar siempre piezas originales. Para mantener “la esencia de Playmobil”, justifica. “Lo único que hago es pintar encima o poner una pegatina”. Y echarle imaginación, resopla. Tuvo que echar mano de un mini hacha de algún indio para tunear el mango en forma de pájaro del paraguas de Mary Poppins

Recomponer a un personaje es tan laborioso como un puzle. La pregunta que más le repiten: ¿cuánto tarda? “Si tengo las piezas en casa –detalla- es relativamente rápido, desmontar y montar. Depende de si la pieza está descatalogada o es difícil de encontrar, de si tengo que pintar o hacer pegatinas…”. Las diseña con Photoshop, las lleva a una imprenta, las pega con paciencia de artesano. "Hay mucho detrás".

“¿Eso es un Playmobil?”, le suelen preguntar. “No –les responde ella-, es EL Playmobil. Yo les digo: ‘Tú intenta hacerlo. Busca dónde salen estas piezas. A lo mejor esta cabeza que tú quieres sale en la mansión, que vale 150 euros. ¿Te la vas a comprar solo por esta cara? O este pelo –señala una melena larguísima- Solo sale en la hípica de Playmobil”. ¿Los que más le han costado? “La Veneno, los Kiss, 'Stranger things' o Mary Poppins”. 

¿De dónde saca las piezas? “Es secreto”. Se ríe, pero no desvela sus fuentes. “Ahora tengo ya algunos contactos que me venden piezas sueltas –dice con tono de estraperlo-, pero antes tenía que comprar una caja… Tú imagínate”. En resumen: “Me gasto un pastón”, confiesa.  

Detalle de un click a medio montar.

Detalle de un click a medio montar. / ALVARO MONGE

Tiene que tirar de Wallapop, ferias, internet, segunda mano. Merodea por las tiendas y toquetea los sobres sorpresas de Playmobil para intuir lo que hay dentro. “Como yo quiero cosas concretas…”. Se encoge de hombros. Se ríe. “Hay más gente friki como yo que lo hace”. 

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