Salvamento

Dan de alta a la mujer que pasó 8 horas en el mar frente a la costa de Barcelona

Un barco ha hallado de madrugada a 4,4 millas de la costa a la bañista, que tuvo fuerza para nadar hasta el buque y pedir socorro

"Debe ser buena nadadora. Si no, es imposible sobrevivir a eso", dice un trabajador del puerto, que da fe de la mala mar durante las últimas horas

La playa de Sant Sebastià de la Barceloneta

La playa de Sant Sebastià de la Barceloneta / Ricard Cugat

Jordi Ribalaygue

Jordi Ribalaygue

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La mujer que ha pasado unas ocho horas dentro del mar alejada de la orilla de la playa de Barcelona se encuentra en buen estado de salud. Después de ser localizada por el buque Medi Sidney, ingresó en el hospital del Mar. Una portavoz del centro explica que la mujer ha estado bajo observación médica y que ha sido dada de alta tras comprobar que no padecía hipotermia ni ningún otro síntoma atribuible a la travesía arriesgada que ha protagonizado entre la tarde del domingo y la madrugada de este lunes.

Los equipos de emergencia han informado esta mañana que han logrado rescatar con vida a la mujer, hallada en alta mar a 4,4 millas de distancia de la costa de Barcelona, que equivalen a unos siete kilómetros. La mujer ha pasado unas ocho horas en paradero desconocido dentro el agua: entró a nadar en la playa de Sant Miquel, en la Barceloneta, hacia las 20.00 horas de este domingo y se dio aviso de la desaparición a las 22.00 horas tras hallarse sus pertenencias abandonadas en la arena, según ha informado la periodista Anna Punsí en su cuenta de Twitter.

Show more

Tras recibir el aviso de que no había vuelto tras adentrarse en el mar, la Guardia Urbana encontró el móvil y el perro de la bañista en la playa, entre otras pertenencias abandonadas. Ninguna bandera ondeaba en la playa cuando empezó a nadar: se había arriado a las 19.30 horas, como se hace siempre en Barcelona. En todo caso, el emblema amarillo lució a lo largo del domingo en Sant Miquel, prueba de que el mar no reunía las condiciones más idóneas para el baño.

Agentes de la Guardia Civil, de Bombers de Barcelona y de Salvamento Marítimo han participado en las tareas de búsqueda. El Medi Sydney -un barco de 229 metros de eslora y de bandera panameña- se hallaba en el fondeadero del puerto de Barcelona cuando vio a la mujer hacia las cuatro de la madrugada de este lunes. Salvamento Marítimo explica que los tripulantes han lanzado un aro para que la nadadora pudiera agarrarse y, a continuación, la han subido a bordo. Sanitarios del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) han atendido a la víctima al llegar a puerto. Posteriormente, la mujer ha ingresado en el Hospital del Mar, en Barcelona.

Con fuerzas para seguir braceando

La Guardia Civil explica que la náufrago ha tenido suficiente fuerza para seguir nadando hasta el barco para llamar la atención de la tripulación y pedir socorro. A continuación, los tripulantes han avisado al Puerto de Barcelona, que ha fletado una lancha de guardia de la corporación de prácticos -las embarcaciones encargadas de controlar las maniobras de entrada y salida de las grandes naves- para trasladar a la víctima hasta tierra.

El cuerpo policial informa que todo apunta a que la mujer se introdujo por su propio pie en el mar, sin ayuda de ningún tipo de embarcación. Salvamento Marítimo ha explicado que la corriente arrastró a la bañista. Cuando fue localizada, el agua estaba a 30 grados, soplaba viento del este y la visibilidad era buena.

Las largas horas que la mujer pasó aguas adentro y que consiguiera salvar la vida ha dejado estupefactos a trabajadores del puerto de Barcelona. "Me sorprende la suerte que ha tenido. Debe ser una nadadora bien preparada porque, si no, es un suicidio", comenta un amarrador, que atestigua el mal estado del mar durante todo el fin de semana en en el litoral de Barcelona.

"Las condiciones no eran nada buenas para salir a nadar", comenta el empleado. "El sábado nos dieron previsión de olas de medio metro, pero llegamos a encontrar algunas de un metro. El domingo no había viento, pero sí que había resaca y mar de fondo", detalla.

El amarrador da fe de que tuvo que hacer frente a un mar removido durante el fin de semana, también este domingo, el mismo que sospecha que pudo coger de improviso a la nadadora y arrastrarla. "Es probable que viera que estaba calmo en los primeros metros y luego se encontró con el mar de fondo. A mí me pasó este domingo yendo con una embarcación de 60 toneladas. Tuve serias dificultades para completar la maniobra para recoger al inspector de un barco. El mar se movía mucho", acredita el trabajador.

El mismo amarrador advierte que las corrientes dentro del mar en Barcelona son traicioneras. "Son más fuertes de lo que parecen. No estamos en el Cantábrico, pero es complejo moverse con condiciones de viento y oleaje", comenta el empleado, que subraya la suerte de que la mujer sorteara todo peligro durante una travesía de tanto riesgo: "Yo iba con un barco grande, le podría haber pasado por encima sin enterarme de que ella estaba allí... Debe estar en forma. Si no, es imposible sobrevivir a eso".

Suscríbete para seguir leyendo