Críticas a TMB

CGT defiende al conductor de bus de Barcelona: "Las jóvenes no solicitaron parada"

Un autobús H16 circulando por el centro de Barcelona

Un autobús H16 circulando por el centro de Barcelona / JORDI COTRINA

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La sección sindical de transportes de Barcelona CGT Bus ha defendido al conductor de bus de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) de la línea H16 al que una madre ha acusado de no dejar bajar a sus dos hijas, y ha asegurado que "las jóvenes no solicitaron parada".

En un comunicado este martes, CGT ha explicado que el conductor ha manifestado a la sección sindical que las chicas eran las dos únicas personas en el autobús y que no solicitaron parada: "Cuando una de ellas se dirigió al conductor preguntándole '¿cuándo nos vas a abrir?', este le contestó que lo haría en la próxima parada".

CGT ha defendido que la situación que relató la madre "no es más que el día a día de un conductor de autobús", cuando los usuarios no solicitan parada, o bien la solicitan y el autobús no la marca debidamente.

Abrir fuera de parada, "peligroso"

Ha recordado que los conductores de autobús tienen prohibido abrir fuera de parada porque "es un acto peligroso", que lo impide la normativa interna y que puede multar la Guardia Urbana, por lo que no abren hasta la siguiente parada.

Además, ha acusado a TMB "de mentir a una madre enfadada, respondiendo a su queja con evasivas" y considera que debería haberle respondido que había localizado al conductor y explicarle lo sucedido.

"Es comprensible que por cualquier motivo a una persona se le pase pedir parada pero ese despiste no puede significar cargar contra la persona que está ejerciendo su trabajo tal y como se le exige. Y mucho menos que se le acabe acusando directa o veladamente de delitos gravísimos", ha insistido.

También ha reprochado a la presidenta de TMB, Laia Bonet, --que lamentó la situación y aseguró que no permitirían que volviera a suceder--, no haber dado "una explicación coherente y real" y le recuerdan que este tipo de situaciones seguirán pasando a diario, a no ser que les soliciten abrir las puertas en todas las paradas.