ERC subraya que David Bondia debe ser el nuevo Síndic de Greuges de BCN

ERC considera que David Bondia debe ser el próximo Síndic de Greuges de Barcelona por haber sido el candidato, entre un total de ocho, que mayor número de votos obtuvo en el proceso participativo vigente, pero no vinculante, sobre la elección del defensor de los barceloneses. En estos términos se ha mostrado este lunes la concejala republicana Elisenda Alamany, cuando faltan semanas para que la actual síndica, Maria Assumpció Vilà, síndica saliente, agote su mandato: “Nosotros daremos nuestro apoyo al candidato de la ciudadanía”.

La previsión es que su sustituto se elija en el pleno del 23 de julio, con un respaldo mínimo imprescindible de 27 de los 41 votos, es decir, una mayoría de dos tercios. De hecho, el desenlace está previsto para la junta de portavoces del 20 de julio, donde todo indica que el candidato que recabe más respaldo será después votado de forma unánime, para evitar imagen de falta de consenso sobre una figura que tiene que ser apartidista.

Los movimientos políticos sugieren que otro candidato, Ramon Nicolau, está en estos momentos a punto de llevarse el gato al agua. “No avalaremos que el candidato elegido por la ciudadanía sea tumbado en un despacho de partido”, ha advertido Alamany.

El ganador de la votación se pregunta si su condición de independiente le perjudicará ante la vinculación de su rival, un especialista en servicios sociales que es exconcejal del PSC

En los últimos días se ha hecho evidente que hay casi un empate a apoyos de los grupos municipales entre los dos candidatos que quedaron en primer lugar del proceso participativo, que permitía el voto de la ciudadanía a uno de los aspirantes y el apoyo de entidades a varios. Bondia, profesor de Derecho Internacional de la UB y presidente del Institut de Drets Humans de Catalunya, logró 1.414 votos, el 46% del total, contra los 410 de Nicolau, que se impuso en adhesiones de entidades: 73 antes las 57 de Bondia. Son números bajos, con 3.034 votos entre todos los candidatos, y aunque ERC no ha entrado en ello, hay concejales de la oposición que acusan al gobierno de Ada Colau de no haberse esforzado en publicitar el proceso de elección.

Reuniones informales

Lo evidente se está demostrando: pese al proceso participativo, lo que está pesando es la opinión de los grupos, lo único vinculante. Por eso Nicolau, que aunque tiene un perfil eminentemente técnico en la gestión de servicios sociales fue concejal del PSC en Barcelona, parece estar más cerca del cargo, porque tiene el apoyo rotundo de los socialistas y Barcelona pel Canvi, y el tácito de PP y Ciutadans, que recelan de Bondia por su apoyo a un referéndum sobre la independencia y a los indultos a los políticos presos por el ‘procés’.

Y en lo que atañe a Junts per Catalunya, cuyos votos serán decisivos, puestos a elegir entre dos aspirantes de los que no se siente próximo, está algo más cerca del candidato del PSC, partido con el que pactó la Diputación de Barcelona, que de Bondia, que además de ser señalado como proindependentista es visto también como un hombre de los 'comuns', algo que él niega. Junts, a la espera del desenlace, se muestra abierto a aceptar que el debate se amplíe a un tercer candidato, una posibilidad que, según fuentes de los posconvergentes, ha puesto sobre la mesa el gobierno de Colau.

Bondia defendió su independencia el sábado en la red social Twitter: "Haber defendido siempre los derechos humanos y no haber tenido nunca un cargo político ni militar en ningún partido puede tener un precio a pagar: habiendo obtenido el 46,6% de los apoyos de la ciudadaní, ¿puede el plenario del Ayuntamiento de Barcelona no validarme como Síndic de Greuges?"

ERC y Barcelona en Comú respaldan a Bondia, aunque los ‘comuns’ están dispuestos a cambiar a Nicolau, o por lo menos lo estaban la semana pasada, para evitar una votación separada con sus socios socialistas.

Alamany ha criticado que los contactos sobre un tema tan relevante sean informales: “El reglamento dice que la alcaldía debe ponerse de acuerdo con los grupos, y eso no significa conversaciones de pasillo ni llamadas. Pedimos formalizar el proceso”. La concejala ha instado a Colau a convocar reuniones formales con los presidentes de los grupos.

“Los últimos movimientos han sido informales y no nos parece serio. Se ha menospreciado el proceso de selección y no se puede hacer partidismo. Lo decimos muy claro: hay un candidato de la ciudadanía y no se le puede tumbar en un despacho de partido. Las dinámicas actuales llevan a pensar que puede suceder eso y no participaremos de ellas”.

‘No’ a retrasar la decisión a septiembre

En opinión de la republicana, en el caso de que una negociación llevara a la elección de Nicolau las reglas del juego se habrían pervertido: “Se cuestiona el proceso, se ensucia a la institución y se deslegitima al nuevo síndico. Nosotros daremos nuestro apoyo al candidato de la ciudadanía. Pensábamos que dada la diferencia tan grande entre el candidato que quedó primero y el resto no habría un gran debate”. ERC apoyaba inicialmente a Jordi Giró como candidato a Síndic de Greuges. Ante el resultado del proceso participativo, se decanta por Bondia. Alamany también ha rechazado hoy la posibilidad de que se gane tiempo y se retrase la elección del síndico a septiembre, lo que obligaría a prolongar el mandato de Vilà: “No entenderíamos que se retrase la votación, no hay motivo para ello”.