Barcelona crea una tarjeta que aglutina todas sus ayudas sociales

Hace tiempo que las administraciones acuñaron tarjetas como las de débito y crédito para entregar a las familias vulnerables que reciben ayudas públicas o de entidades sociales. El objetivo está claro: evitar el estigma en una sociedad en la que la aporofobia, el odio al pobre, es una realidad. No se trataba solo de evitar a los más extremistas: a nadie le resulta cómodo que quede en evidencia que se ha visto en posición de recibir ayuda. Entidades como la Creu Roja apostaron por esta vía y el Ayuntamiento de Barcelona ha tomado la decisión de acuñar una sola tarjeta monedero que sirva para percibir todas las ayudas que otorgan los servicios sociales del consistorio.

La medida, que corresponde al Instituto Municipal de Servicios Sociales, supone aglutinar en una tarjeta tres prestaciones existentes, y además de minimizar el estigma  simplificará el proceso burocrático que está asociado al proceso de petición de las ayudas. La tarjeta podrá emplearse para comprar productos de necesidad básica: alimentos, ropa, material escolar. También sirve para pagar matrículas docentes y recibos, y para acceder a descuentos y ventajas de entidades. Es nominal y solo la puede emplear su titular. No está planteada para sacar dinero en cajeros. Se llama Barcelona Solidària, y ya existía con esta denominación aunque solo para acceder a ropa, comida, entre otros productos.

B-MINCOME, infancia y alimentación

Las tres ayudas que existían separadamente y que ahora podrán quedar acumuladas en una sola eran la del fondo de infancia que reciben familias con hijos de 0 a 16 años, la del B-MINCOME (la prueba piloto de una renta garantizada en Barcelona) y la tarjeta de alimentación.

El titular del documento no necesariamente recibirá las tres ayudas. Será gestionado por la Oficina de Prestaciones Sociales y Económicas, que el ayuntamiento abrió en septiembre del 2017. El consistorio la pondrá en circulación durante este 2020 con un censo de 16.000 familias usuarias de los servicios sociales y un presupuesto de 19 millones de euros para el 2020. De las 16.000 familias, cerca de la mitad recibe la ayuda por hijos 0-16.

La tarjeta Barcelona Solidaria ha sido presentada este martes por la comisionada de Acción Social, Sonia Fuertes: “Supone un mecanismo para profundizar en un sistema más transformador, más empoderador, menos asistencialista y menos paternalista, y para cambiar la concepción de los Servicios Sociales con el fin de considerarlos una ayuda más”, ha afirmado.