conflicto urbano

La ofensiva contra el 'top manta' en la plaza de Catalunya traslada más presión al Portal de la Pau

Los artesanos de la zona reclaman el desalojo urgente a la Policía Nacional por motivos de "seguridad"

Manteros en la plaza de Colom, en Barcelona

Manteros en la plaza de Colom, en Barcelona. / periodico

Patricia Castán

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El operativo especial para erradicar la venta ambulante en el intercambiador de Rodalies  en plaza Catalunya ha funcionado por fin en esa zona, pero ha propulsado a decenas y decenas de vendedores de 'top manta' en busca de aceras donde intentar despachar su mercancía. Uno de los espacios que más lo están sufriendo es el entorno del Portal de la Pau, donde el mercado de 'brocanters' instalado a pocos metros del monumento a Colom hace 25 años ha reclamado hoy miércoles en un comunicado a la Policía Nacional y la Guardia Civil que intervengan y desalojen esta actividad ilegal.

El perímetro portuario lleva muchos meses siendo epicentro de la venta de 'top manta' en Barcelona, especialmente concentrada en el paseo de Joan de Borbó, como ha denunciado en infinidad de ocasiones la Plataforma de Afectados por el 'Top manta', que aglutina a numerosas asociaciones de comerciantes. Pero su extensión por el paseo de Colom ha ido creciendo con el tiempo y se ha disparado ahora con la aparición de manteros que ya no pueden colocar su mercancía en el subsuelo de la plaza de Catalunya.

"En esta época del año no es normal que haya cientos de vendedores irregulares en la zona, a nosotros nos han dejado aislados, los compradores no pueden llegar a nuestras tiendas por esta competencia desleal", se queja a este diario Héctor Guillermo Izuel, presidente del Mercat de Colom.

"Un polvorín"

"El Portal de la Pau es un Polvorín. La organización que mueve los hilos del 'top manta' se ha adueñado del espacio público", lo que al margen del impacto económico sobre su actividad comercial, consideran un "grave problema de seguridad" para los paseantes de la zona. El colectivo, una veintena de 'brocanters', lamenta que la policía portuaria carezca de "efectivos suficientes" y "preparación" para afrontar semejante volumen de venta ilegal, mientras que "los mossos siguen sin prestar su colaboración", según "dice reiteradamente el ayuntamiento" y la Guardia Urbana ha demastrado "incapacidad" para combatirla. 

Con esos argumentos, en una nota difundida esta tarde piden a la alcaldesa Colau que solicite la intervención de CNP y la Guardia Civil para afrontar una situación "enquistada hace un año" agravada ahora por los llegados de otras zonas.

Una redada de la Guardia Urbana el pasado sábado -como recogieron en un vídeo- "se vio frustrada ante la agresividad" de algunos vendedores, que "hicieron batir en retirada" a los agentes, mantienen. Y aducen que las "estampidas humanas" acabaron con algunos turistas cayendo al suelo y resultan "peligrosas" para los viandantes.