Los Encants de Sant Antoni deberán cerrar este martes

Con la facturación claramente por encima de la anterior etapa, el área de Encants -ropa y complementos- del mercado de Sant Antoni ha visto reavivada la polémica por sus horarios comerciales. Los buenos resultados económicos tras tres semanas en funcionamiento han variado la balanza de las opiniones hasta el punto de que los defensores de ampliar los días de trabajo tienen previsto abrir mañana martes, pese a que el ayuntamiento confirmó la noche del lunes que se impone de momento el horario tradicional (solo cuatro días por semana), como se decidió por votación en abril.   

El ayuntamiento, que se remite a las ordenanzas para que lo diriman los operadores, trató de mediar hasta las 21.00 horas. El Instituto de Mercados municipal implantó las dos primera semanas un horario excepcional de lunes a sábado para todos con motivo de la expectación que causó la reapertura. La tercera semana (la pasada) se prorrogó esta situación pero con aperturas voluntarias. El pasado martes hubo más persianas bajadas que abiertas, pero el jueves la situación se invirtió. Con una asamblea extraordinaria de operadores prevista para el martes, durante todo el lunes reinó la confusión. El nuevo presidente de la junta, Joan Mestre, enfatiza que no está claro que en el nuevo encuentro se vote al respecto.

Las dos posiciones son tan marcadas que los que quieren abrir más días no descartan acciones legales (por lucro cesante) si no se les deja abrir, mientras que si abren podrían ser sancionados. El resto cree que que se debe respetar el resultado de la votación celebrada en abril, donde se impuso claramente el horario de siempre, lunes, miércoles, viernes y sábado. 

Modelo comercial

Ese resultado, como avanzó EL PERIÓDICO el 24 de abril, costó la dimisión de la anterior junta y abrió un enfrentamiento sobre el modelo comercial que debe seguir Sant Antoni. La ordenanza de Mercados estipula que los no alimentarios tienen cuatro días de apertura obligatoria, a los que pueden agregar más jornadas si así lo acuerdan los comerciantes. Pero el caso de Sant Antoni es singular, porque conviven los Encants y el de alimentación. El de ropa suma más de cien puestos y el de comida la mitad, de manera que dos días a la semana (martes y jueves) en teoría habría muchos más puestos cerrados que abiertos.

Otra circunstancia aviva el debate. Y es que el ayuntamiento ha invertido más de 80 millones de euros y ocho años de obras, con lo cual tanto algunos concejales del consistorio como operadores del mercado y el entorno consideran que este debe tener más retorno para la ciudad. Más oferta. 

En plena polémica, el consistorio realizó una encuesta interna hace unos días donde las opciones de abrir cinco días o de cuatro más dos voluntarios sumaron más partidarios que la posición más conservadora de abrir solo cuatro.

En los Encants hay comercios de gran envergadura, con importantes inversiones, que defienden poder trabajar como el resto del mercado, voluntariamente. "Nos lo piden clientes, vecinos y proveedores", mantiene Ángel Cardiel, con una amplia zapatería. Pero también hay muchos puestos de pequeño tamaño sin dependientes que consideran que las nuevas jornadas afectarían a su conciliación familiar. Un término medio en discusión sería abrir de martes a sábado y así librar dos días seguidos.