"En Sant Cosme todo estaba por reclamar, fueron años de una lucha feroz"

María Godoy se encontró con un bebé con parálisis cerebral en un entorno de barracas en Horta que se inundaba con demasiada facilidad. "Entonces yo era muy poca cosa, nadie me hacía caso. Pero no me rendí y escribí hasta a Franco para dar un hogar en condiciones a mi familia". Por todo eso y por las dificultades del momento la llegada al barrio de Sant Cosme, lejos de amilanarla, le pareció una nueva oportunidad. "En el barrio todo estaba por terminar, todo se tenía que reclamar y fueron años de una lucha feroz", recuerda. Y destaca que la de la educación y la sanidad eran las primeras de sus reivindicaciones, para garantizar que sus hijos tuvieran "un futuro en igualdad de oportunidades".

Achaca a "los palos de la vida" su actitud decidida ante los desafíos. Y hace un mohín cuando se le recuerda que todos en el barrio la tienen por una mujer sabia. Ella simplifica su labor destacando que pone su experiencia y su fuerza "al servicio de quienes lo necesitan". Por necesitar, buena falta haría que les prestaran atención desde los altos despachos. "Ojalá tengan un momento para escuchar a estas arrugas y que luego decidan lo mejor para este mundo", explica.