INFORME DE LA ASPB

Un 4,1% de los alumnos de Barcelona tiene una alergia alimentaria

El ayuntamiento implanta un plan de vigilancia en los centros para prevenir

Un comedor escolar

Un comedor escolar / periodico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Un 4,1% de los alumnos de escuelas de Barcelona tiene alguna alergia o intolerancia alimentaria, de las que un 17,3% son por intolerancia a la lactosa y el 17% a las frutas rosáceas, según datos de la Agència de Salut Pública de Barcelona presentados este jueves en rueda de prensa.

El gerente de Salut Pública de Barcelona, Conrad Casas, junto a la presidenta de la entidad, Cristina Iniesta, ha presentado el informe 'La salud en Barcelona 2013', que recoge el programa de Vigilancia de Alergias e Intolerancias Alimentarias (Vaiame), que ha implantado en todos los comedores escolares de la ciudad --773--.

La primera fase del plan consistió en un estudio preliminar que analizó 129 escuelas públicas y privadas --50.000 estudiantes-- con el objetivo de ver si había demandas de dietas especiales en los menús y conocer las medidas preventivas adoptadas en los centros, lo que permitió dar con este 4,1% de casos.

El estudio también detectó que solo el 45% de las alergias declaradas en la matriculación se acompañaban de un certificado médico, lo que Salut Pública ve como un "dato significativo", de manera que ha recomendado a los centros que pidan este certificado y faciliten una dieta o un espacio para que el escolar pueda comer el alimento de casa.

Por el momento, el 80% del 64% de escuelas que no disponía de ningún plan documentado de control de alérgenos --sólo un 36% realizaba algún tipo de actuación-- ya lo ha implantado.

Dos tipologías

Salut Pública ha preparado dos tipos de programas documentados de control, uno para las escuelas con servicio de comedor y otro para las empresas de catering, que contienen requerimientos diferentes.

Contemplan cuestiones como identificar la composición de los menús y actualizarlo; tener buena información sobre los niños por parte de los centros, las empresas y los monitores; documentar los controles, e incluso apartar a los niños alérgicos a la hora de comer en edades tempranas.

Casas ha detallado que las alergias son un problema de salud creciente que les "preocupa": afectan a entre un 5% y un 7% de la población infantil europea y en España se han duplicado los casos en los últimos años.