Chequeo de la cohesión social en el área metropolitana (2)

Mar en calma en el Besòs

Inquietud 8 Un grupo de vecinos gitanos, quejándose por la fuerte presión policial, el viernes.

Inquietud 8 Un grupo de vecinos gitanos, quejándose por la fuerte presión policial, el viernes.

MARINA MUÑOZ BENITO
BARCELONA

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«El barrio del Besòs está recuperando su pulso normal, sin olvidar el hecho y el dolor producido, que se recordarán durante años», expone Fèlix Rodríguez, presidente de la Associació de Veïns i Veïnes del Besòs. Y es que, tras el homicidio del senegalés Ibrahima Dyey el 3 de enero a manos de una persona de etnia gitana y las consecuentes tensiones y movilizaciones que siguieron al crimen, la tranquilidad vuelve poco a poco a esta zona del distrito de Sant Martí. Fode Mane, de la Associació Catalana de Residents Senegalesos (ACRS), recuerda que«no ha sido un conflicto entre colectivos, sino entre dos personas». Mane, quien ha estado al pie del cañón desde casi el mismo momento del crimen, reconoce que«la gestión no ha sido fácil, pero se ha hecho bien».

«Eso no significa que no pueda quedar un pequeño grupo, a título particular, un poco alterado», aclara el comisionado de Inmigración del Ayuntamiento de Barcelona, Miquel Esteve, para el que la rueda de prensa del pasado día 5 de enero, en la que todas las entidades del barrio (incluidas las de gitanos, como la FAGiC, y la de senegaleses) condenaron conjuntamente el asesinato y pidieron justicia, fue la«prueba del algodón»para el tejido asociativo del Besòs. Ante estos posibles rescoldos, el ayuntamiento mantendrá, como mínimo los primeros días de esta semana, el dispositivo de mediación de urgencia que puso en marcha el mismo día 3 de enero.

Y es que, aunque los ánimos se hayan templado, cuesta dejar a un lado ciertos sentimientos encontrados. Desde el vecino Centro Cultural Gitano de La Mina, su presidente, Rafael Perona, que ha denunciado enérgicamente el crimen, valora los 10 días siguientes a este como un acoso.«Nos hemos visto atacados por algunos medios y partes de la sociedad, que han criminalizado a todo el colectivo gitano», explica. Además, en los alrededores del lugar de los hechos (la calle de Palerm), algunas personas de etnia gitana critican y muestran su enfado por la fuerte presión policial que están viviendo estos días en la zona.

Propuestas para convivir

«Nunca falta el entendimiento, si no la discusión o el debate». Con esta máxima, un tradicional dicho senegalés, Mane apunta al principal elemento, además de la justicia, al que han recurrido y recurrirán: mediación y cohesión social. Y es que este lo tiene muy claro:«A la violencia no se puede responder con violencia».

Tras la propuesta que el presidente de la FAGiC, José Santos, hizo el día 5 para crear una plataforma de diálogo, el comisionado de Inmigración se ha comprometido a impulsar una mesa para la diversidad y la convivencia. Igualmente, las necesidades en el Besòs han cambiado (en parte debido al descenso de la llegada masiva de inmigración) y desde este organismo también reconocen que deben«desplazar los recursos de la primera acogida y poner el acento en la convivencia y la cohesión de la sociedad».

Esto es algo que Rafael Perona echaba de menos hace tiempo.«Hace falta intervención administrativa. Necesitamos más medidas sociales y más recursos económicos», apunta. No obstante, Fèlix Rodríguez recuerda que la ley de barrios 2008-2013«está impulsando el Besòs y el Maresme con una ayuda de 14 millones de euros, entre los que se incluyen, además del tocho, diversos planes de ocupación y de mediación».

Duelo y repatriación

Otra muestra de convivencia se pudo ver el pasado jueves, 12 de enero, cuando se celebraron, en el tanatorio de la Ronda de Dalt y por el rito musulmán, los actos funerarios para velar el cuerpo de Ibrahima Dyey. Representantes municipales, de vecinos del barrio y del consulado y amigos acompañaron en estos difíciles momentos a un primo hermano y a un tío de la víctima, llegados tras el homicidio. A esta despedida se sumaron, el sábado al mediodía, unos jóvenes de un CAU de Sant Adrià, que soltaron globos con un mensaje de paz y solidaridad en la calle de Palerm.

Una vez tramitados los perminos, el cuerpo de Ibrahima será repatriado en avión, posiblemente hoy o mañana. Dado el elevado coste, la comunidad senegalesa, vecinos del barrio e incluso el propio consistorio han puesto su granito de arena para que sea posible.