PLAN DE REINTRODUCCIÓN DE AVES DE RAPIÑA

Los halcones de la Sagrada Família atraen a la ciudadanía

Unos telescopios instalados en la plaza permitieron ver la reserva de rapaces

EL PERIÓDICO
BARCELONA

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Esta vez para muchos la estrella no era la obra de Gaudí, sino la pareja de halcones peregrinos con sus cuatro pollos que han anidado en el campanario de Sant Bartomeu del templo de la Sagrada Família. Unas 200 personas pudieron observarlos ayer a través de unos telescopios que se instalaron en la plaza enfocando esta torre de difícil acceso.

Como avanzó EL PERIÓDICO el pasado 4 de mayo, una pareja de halcones que fueron soltados en la ciudad (dentro de un programa de reintroducción de esta especie que se puso en marcha en el año 2005) ha criado este año cuatro pollos en este lugar, los cuales, si todo funciona como está previsto, abandonarán a sus padres en pocos meses en busca de un nuevo hogar. El macho es un ejemplar liberado en el puerto de Barcelona en el 2001, mientras que la hembra nació en el acantilado del Morrot de Montjuïc en el 2006, criando un total de nueve crías en diferentes temporadas.

Según el responsable del programa de reintroducción y seguimiento de halcones en la capital catalana, Eduard Durany, los halcones se adaptan muy bien a las ciudades, porque "viven en paredes rocosas, ya sean artificiales o naturales, y se alimentan de otros pájaros, lo que en Barcelona no les falta". A ello se suma que en el campanario de Sant Bartomeu han encontrado un lugar tranquilo al que no llegan los turistas que diariamente ascienden por las escaleras del templo de la Sagrada Família.

Cada vez que nace uno se le coloca una anilla identificadora, por lo que se tiene constancia de que uno de los halcones nacido hace unos años en el campanario se encuentra ahora en la zona de Diagonal Mar y otro en la térmica de Cubelles.